Pandemia

Un hombre se vacuna 90 veces contra el covid para vender pasaportes sanitarios

Un alemán de 60 fue neutralizado por la Policía cuando acudió por segundo día consecutivo a un centro de vacunación de Sajonia para obtener la segunda dosis

Un hombre de 87 años se vacuna en Alemania contra el covid-19
Un hombre de 87 años se vacuna en Alemania contra el covid-19Michael ProbstAgencia AP

Un hombre de 60 años confiesa haberse vacunado 90 veces contra la covid-19 para vender pasaportes sanitarios a aquellas personas que no querían vacunarse. El alemán residente en Magdeburg, Alemania Oriental, y cuyo nombre no se ha hecho público para preservar su identidad, asegura que se ha vacunado múltiples veces en el estado de Sajonia hasta que fue interceptado a principios de este mes por la Policía alemana.

El sospechoso no ha sido detenido, pero está bajo investigación por la manipulación de los documentos sanitarios. Fue neutralizado en el centro de Eilenburg en Sajonia cuando se presentó para recibir una segunda dosis de la vacuna por segundo día consecutivo. La Policía confiscó varios pasaportes sanitarios e inició una investigación criminal.

No está claro el impacto a la salud que puede acarrear las aproximadamente 90 dosis que se ha inyectado y que al parecer serían de distintas farmacéuticas.

La Policía alemana ha dirigido varias redadas e investigaciones en relación con el tráfico ilegal de pasaportes sanitarios en estos últimos meses. Muchos de los negacionistas de la pandemia rechazaron vacunarse pero, paralelamente, trataron de obtener pases verdes para poder tener acceso a la vida pública como restaurantes, teatros, piscinas públicas.

Sin mascarillas en interiores

Alemania ha sufrido un aumento de las infecciones durante las últimas semanas pero muchas de las restricciones de la pandemia se eliminaron el pasado viernes. Las mascarillas ya no son obligatorias en los interiores de las tiendas o de los teatros pero en el transporte público sigue siendo obligatoria.

En la mayoría de las escuelas alemanas los estudiantes ya no están obligados a llevar mascarillas lo que ha llevado a las asociaciones de maestros de advertir de posibles conflictos en clase.

“Hay un peligro de que los niños que quieran llevar mascarillas sean increpados por sus compañeros”, sostuvo Heinz-Peter Meidinger, el presidente de la Asociación de Profesores Alemana. Aboga por dejar al criterio de alumnos y profesores el uso de las mascarillas en clase al menos hasta la llegada de la Semana Santa.