
OTAN
Suecia, Estonia y Finlandia se comprometen a comprar más armas a EEUU
El jefe del Pentágono pide a los países de la OTAN más inversión para proporcionar a Ucrania los medios necesarios para derrotar a Rusia

Mientras Ucrania continúa bajo la presión de los ataques rusos, las divisiones dentro de la OTAN sobre la financiación y el suministro de armas vuelven a hacerse evidentes. Suecia, Estonia y Finlandia anunciaron nuevos compromisos para aumentar el gasto en la compra de armamento estadounidense destinado a Kiev, pero otros aliados, entre ellos España, Italia, Francia y el Reino Unido, han sido criticados por no incrementar sus aportaciones. Según informó Reuters, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, instó a los países aliados a reforzar su participación en el programa Prioritized Ukraine Requirements List (PURL), un mecanismo que sustituye las donaciones directas de armas por un modelo de compra financiado por los propios socios. Hegseth advirtió que “la paz se logra cuando se es fuerte, no con palabras fuertes”, y pidió más inversión para proporcionar a Ucrania los medios necesarios para alcanzar una resolución del conflicto.
El secretario general de la OTAN, Mark Rutte, confirmó que el programa ha recaudado unos 2.000 millones de dólares, una cifra que todavía está por debajo de los 3.500 millones que el presidente ucraniano Volodímir Zelenski esperaba reunir antes de octubre. Según el Instituto Kiel para la Economía Mundial, la ayuda militar a Ucrania cayó un 43 % en julio y agosto con respecto al primer semestre del año, lo que refleja un descenso significativo en el compromiso internacional.
Los ministros de Defensa de Holanda y Finlandia apelaron a que todos los países de la OTAN intensifiquen su gasto en defensa y a mostrar su "solidaridad" con Kiev, tras las nuevas amenazas contra España del presidente estadounidense, Donald Trump, por no elevar su gasto militar al 5 % de su PIB. El ministro neerlandés de Defensa en funciones, Ruben Brekelmans, animó "a todo el mundo a intensificar" su esfuerzo, en declaraciones a los medios durante la reunión de titulares del ramo de la OTAN que se celebra hoy en Bruselas.
Brekelmans se pronunció así al ser preguntado sobre la contribución de países del sur de la Alianza como Francia, Italia o España al gasto en defensa o el apoyo militar a Ucrania. "Cuanto más esperemos y si no actuamos, el coste solo va a incrementarse. La mejor inversión y más eficaz en nuestra seguridad es apoyar a Ucrania ahora y no esperar a que la situación empeore", dijo.
El titular finlandés, Antti Häkkänen, enfatizó por su parte "la solidaridad que todo el mundo en Europa" debe mostrar para asumir "una parte justa de la carga de ayudar a Ucrania". Por otra parte, el ministro rumano, Liviu-Ionuț Moșteanu, aseguró que como país del flanco este se siente respaldado: "Sí, estamos apoyados, tenemos tropas aliadas, unos 5.000 soldados especialmente de EE. UU., Francia, Portugal, España y Polonia", recalcó.
En Alemania, el ministro de Defensa, Boris Pistorius, enfrenta críticas internas mientras intenta cumplir con el mandato del canciller Friedrich Merz de construir “el ejército convencional más fuerte de Europa”. El debate se ha centrado en el modelo de reclutamiento: Pistorius, del Partido Socialdemócrata, defiende un sistema voluntario, mientras que los conservadores de la CDU/CSU proponen un sorteo obligatorio si no se alcanzan los cupos necesarios. El ministro calificó esta idea de “compromiso perezoso” e “impracticable”, lo que ha provocado la postergación del proyecto de ley previsto para esta semana. Estas tensiones políticas amenazan con obstaculizar los esfuerzos de Berlín por reforzar su capacidad defensiva en un momento clave para la seguridad europea.
Al mismo tiempo, Rusia continúa adaptando su estrategia militar. Según la agencia Associated Press, las fuerzas rusas han incorporado importantes mejoras tecnológicas a su flota de drones desde el verano. Los nuevos dispositivos incluyen cámaras y módems de radio que permiten ajustar el vuelo en tiempo real y transmitir vídeo a los operadores en territorio controlado por Moscú. Estas modificaciones aumentan de forma notable la precisión de los ataques, especialmente contra objetivos móviles como locomotoras y trenes de carga. El experto militar ucraniano Serhii Beskrestnov advirtió que “si los rusos siguen golpeando los trenes diésel y eléctricos, pronto tendremos vías intactas, pero nada que pueda circular sobre ellas”. Según los análisis de su equipo, los drones rusos pueden volar hasta 200 kilómetros dentro del territorio ucraniano manteniendo la comunicación con sus operadores, lo que incrementa su capacidad de ataque y reduce las posibilidades de interceptación.
✕
Accede a tu cuenta para comentar