Cuidado de la piel

¿Qué es el 'microneedling'? La guía definitiva sobre el tratamiento que regenera tu piel desde dentro

El "microneedling", conocido por muchos como Dermapen, se ha convertido en una de las técnicas estéticas más solicitadas del momento por su destacada capacidad para inducir colágeno y mejorar la piel en pocos días

 La piel, el órgano más grande de tu cuerpo
La piel, el órgano más grande de tu cuerpo

La búsqueda de una piel radiante y sin imperfecciones ha impulsado el desarrollo de técnicas estéticas avanzadas. En este afán por la regeneración cutánea, el microneedling emerge como una de las propuestas más innovadoras y demandadas en el campo de la belleza actual.

Esta técnica utiliza microagujas para crear microlesiones controladas en la piel, estimulando así la formación de colágeno y elastina y promoviendo una intensa regeneración celular desde el interior.

Como resultado, los tratamientos de microneedling ofrecen una mejora en diversas condiciones. Se observa atenuación de cicatrices de acné, reducción de arrugas finas, cierre de poros, aumento de la luminosidad y una sustancial reducción de la pigmentación irregular, unificando el tono de la piel.

Mecánica precisa y personalización de tratamientos

El microneedling se aplica con un dispositivo similar a un bolígrafo que incorpora un sistema de multiagujas de profundidades programables y variables. La técnica abre microcanales en la piel, facilitando una penetración superior de diversos principios activos, según señalan desde Elle. Es importante destacar que la profundidad máxima permitida difiere según el establecimiento: hasta 2.5 mm en clínicas médicas, mientras que en centros de estética se limita a 0.5 mm por motivos de seguridad.

En este sentido, la personalización del tratamiento es un factor diferencial clave. Tras la apertura de estos canales, se administran principios activos seleccionados específicamente para las necesidades de cada paciente. Entre los compuestos que pueden emplearse se encuentran exosomas, silicio orgánico, DMAE, oligoelementos, ácido hialurónico no reticulado, Vitamina C o ácido tranexámico, todos ellos potenciando los resultados deseados.

Para lograr los efectos deseados, es habitual que se requieran múltiples sesiones. Los tratamientos superficiales suelen requerir unas tres sesiones cada mes y medio o dos meses; para resultados más profundos, se aconseja un mínimo de seis, espaciadas cada tres o cuatro semanas. Los efectos secundarios comunes son enrojecimiento de la piel, que puede perdurar hasta cinco días, e irritación o tirantez, fenómenos que suelen disiparse en 24 o 48 horas. Sin embargo, este procedimiento está contraindicado en casos de infecciones activas en la piel, como acné inflamatorio o dermatitis aguda, y se desaconseja la exposición solar intensa poco antes o después de su aplicación. El coste por sesión suele oscilar entre 120 y 250 euros, variando en función de la zona tratada, los activos utilizados y el tipo de procedimiento.

En definitiva, el microneedling se consolida como una respuesta eficaz para la regeneración y mejora de la piel. La clave para asegurar tanto el éxito del procedimiento como la seguridad del paciente reside en la elección de un profesional cualificado y un centro que ofrezca las garantías adecuadas para el tipo de tratamiento y la profundidad deseada. La ciencia y la tecnología continúan avanzando, ofreciendo soluciones estéticas cada vez más sofisticadas, siempre que se apliquen con el conocimiento y la responsabilidad que requieren.