Consumo

El «alivio» de la rebaja del IVA: ni seis euros de ahorro por familia al mes

Los supuestos 660 millones que va a costar la medida en el primer semestre de 2023 suponen una ridícula cifra de apenas 35 euros por hogar en total

El pasado 1 de enero el IVA de algunos alimentos pasó del 4% al 0% en el caso de los considerados de primera necesidad: pan, leche, huevos, frutas, verduras, quesos, harinas y cereales. Esta medida «estrella» del Gobierno socialcomunista, anunciada a bombo y platillo por Pedro Sánchez, costará 660 millones de euros durante los seis meses que en principio va a estar vigente, según los cálculos de Hacienda. 660 millones de euros que no van a servir para nada, más que para sacar pecho en Moncloa, porque ni un solo hogar en España va a notar el más mínimo alivio a la hora de hacer la compra. Un dispendio inútil que dividido entre los algo menos de 19 millones de hogares que hay en España arroja un ridículo ahorro por familia de apenas 35 euros en seis meses. Es decir, no llega ni a seis euros al mes.

Teniendo en cuenta que según la OCU la cesta de la compra de una familia media ha subido 830 euros al año –unos 70 euros al mes de incremento–, los seis euros de supuesto ahorro no dan ni para pipas. Eso suponiendo que efectivamente se logra ese ahorro, que está por ver. Porque para ahorrar seis euros con una rebaja del 4% al 0% hay que gastar 150 euros mensuales sólo en esos productos. Y la otra rebaja del IVA, la del aceite y la pasta del 10% al 5%, tampoco es que vaya a aportar mucho más que unos escasos céntimos a las maltrechas cuentas de unos hogares a los que ya no hay por dónde exprimir.

El «cheque» de 200 euros casi mejor ni nombrarlo, porque es para cuatro gatos y además va a llegar a la mitad de la mitad de esos, como pasó con el fracasado Ingreso Mínimo Vital o con el anterior cheque «antiinflación» del verano. Será interesante ver en cuánto se quedan finalmente los 1.200 millones –ni ellos se lo creen– que Hacienda dice que se va a gastar en la medida.

E incluso aunque fuese así, se olvida de 14,5 millones de hogares que no están en muchos casos para grandes dispendios. Porque aquí siempre acaban pringando los mismos: la supuesta clase media con nómina, el pardillo perfecto al que sacar los cuartos a cambio de migajas. Así que la próxima vez que vayan al súper, no se preocupen y llenen el carro con alegría, que la barra de pan vale dos céntimos menos. Qué alivio.