Dime qué tipo de barriga tienes de estos cuatro (y te diré qué problema sufres)

Cada cuerpo es un mundo. Los humanos nos caracterizamos por ser únicos genéticamente gracias a las alteraciones de nuestro ADN que consiguen que no existan clones entre personas.

Aun así, existen muchos casos en los que fisicamente si puede darse que dos personas sean iguales. Aunque la probabilidad es muy pequeña, muchos son los que han encontrado a sus dobles como es el caso de los actores de películas.

Una de las partes más famosas del cuerpo humano es la barriga. Tema de conversación en muchos momentos esta se ha convertido en todo un símbolo de la salud y del ejercicio con el paso de los años.

Frases como “barriga cervecera” han puesto a esta parte del cuerpo en el punto de mira de muchos que pretenden eliminarla a toda costa. Con la llegada de las navidades, además, hay quien coge cierto peso debido a los excesos que en muchas ocasiones se pueden observar en la cintura y zona abdominal.

Existen muchas causas que alteran la forma de esta parte como pueden ser la grasa, retención de líquidos o dar a luz. Por este motivo tener una barriga plana y definida se convierte en ocasiones en toda una odisea que puede llegar a ser un problema, incluso, de salud mental.

El famoso “six pack” donde los abdominales forman parte de un estetico cuerpo muscular han o el vientre plano son dos de los ejemplos de barrigas que la gente persigue. Aun así, muchos especialistas recomiendan no seguir estos cánones que pueden derivar en problemas mentales a la larga.

Los cuatro tipos de barrigas

Existen distintos tipos de barrigas y cada una cuenta con unas características propias que indican diferentes cosas de nuestro cuerpo. A continuación repasamos los cuatro tipos de zonas abdominal y lo que indican.

• Barriga hinchada: el vientre suele ser mucho más plano a primera hora de la mañana que el resto del día. Esto se debe a la distensión de los órganos durante toda la noche que consigue aparentar una barriga más plana. Aun así, este tipo de zona abdominal con hinchazón suele deberse a acumulación de gases o indigestiones que se encuentran relacionadas con intolerancias alimentarias o alergias. El uso de probióticos o no comer muy tarde por la noche pueden ayudar a aliviar este tipo de problema.
• Vientre de postparto: tras dar a luz suele darse este tipo de vientre abultado en la zona inferior que puede durar en ocasiones hasta dos años. Volver a hacer ejercicio y el consumo de ácidos grasos instaurados como el aguacate son dos potentes aliados para recuperar una barriga plana tras el embarazo.
• Barriga pequeña y baja: este tipo de vientre se relaciona con la falta de ejercicio y sedentario tan presente en la sociedad. La acumulación de grasa en esta parte del cuerpo suele ser tratada con un aumento del ejercicio de fuerza que ayude a muscular y perder grasa a la larga y conseguir eliminar ese tipo de vientre.
• Vientre de estrés: el cambio de trabajo hacia un mundo laboral de oficina y ritmos rápidos ha provocado la aparición de este tipo de barriga. Con una hinchazón dura y prominente en la zona que va desde el diafragma al ombligo está producida por los malos ámbitos alimentarios y el cortisol que ayuda a acumular grasa abdominal. Mejorar la alimentación e intentar llevar una vida más pausada son dos de los consejos médicos para este tipo de zona abdominal.