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Hogar

Casi todos se olvidan de limpiarlo: este es el lugar donde más polvo se acumula en casa

Por mucho que barras, friegues o pases el trapo, siempre hay un rincón que se nos escapa en la limpieza diaria

Una persona limpiando el polvo en casa Freepik

Mantener una casa limpia es una tarea constante. Cada semana dedicamos tiempo a fregar suelos, pasar la aspiradora o limpiar mesas y estanterías. Más ahora, a la vuelta de vacaciones, después de haber pasado unos días de descanso sin que hubiera nadie en la vivienda. Sin embargo, el polvo parece volver una y otra vez, como si nunca termináramos de ganarle la batalla.

Lo curioso es que, aunque nos esforcemos en dejar impecables las superficies que tenemos a la vista, siempre queda un rincón olvidado que acumula más suciedad de la que imaginamos. Ese descuido no solo tiene un efecto estético: también puede reducir la calidad del aire y generar molestias para quienes sufren de alergias o problemas respiratorios.

¿Cuál es el lugar más olvidado para limpiar el polvo?

El polvo doméstico no es solo pelusa o suciedad. Está compuesto por una mezcla de pequeñas partículas en suspensión, restos de fibras textiles, polen, células muertas de la piel e incluso contaminantes que entran desde el exterior. Todo ello se deposita poco a poco en diferentes rincones de la casa.

Aunque limpiar el suelo o pasar la aspiradora debajo del sofá ayuda, esas partículas también se acumulan en lugares más altos y menos accesibles. Y allí pueden quedarse semanas, pasando desapercibidas.

Si piensas en qué zonas de tu casa limpias con frecuencia, probablemente la respuesta sea clara: suelos, encimeras, estanterías o mesas. Pero ¿cuándo fue la última vez que pasaste un trapo por la parte superior de los marcos de las puertas?

Este es el punto más olvidado en la mayoría de hogares. Está fuera de nuestro campo de visión, cuesta alcanzarlo y, al no notarse a simple vista, rara vez le dedicamos tiempo. Sin embargo, esas superficies horizontales son auténticos imanes para el polvo: acumulan capas cada vez más gruesas que, con el movimiento de abrir y cerrar la puerta, se desprenden y vuelven a circular por el aire.

Polvo en casaistock

¿Por qué conviene limpiar este rincón?

Ignorar la limpieza de estas zonas tiene consecuencias que van más allá de la estética. El polvo acumulado en marcos y puertas puede:

  • Afectar la calidad del aire de la vivienda.
  • Incrementar la presencia de alérgenos, provocando estornudos, congestión o irritación ocular.
  • Favorecer un ambiente más cargado y menos saludable.

En otras palabras: aunque tu casa parezca limpia, ese polvo invisible seguirá circulando y afectando al bienestar de quienes la habitan.

Cómo solucionarlo de forma sencilla

La buena noticia es que mantener estas superficies limpias no requiere grandes esfuerzos ni productos especiales. Basta con incorporar un pequeño gesto a la rutina de limpieza semanal:

  • Utiliza un paño de microfibra ligeramente húmedo para atrapar el polvo sin levantarlo.
  • Si la altura lo dificulta, recurre a un plumero largo o a la escoba envuelta en un trapo.
  • Realiza la limpieza de arriba hacia abajo, para evitar que el polvo caiga sobre zonas ya limpias.

Con una pasada rápida cada pocos días, notarás enseguida la diferencia en el ambiente de la casa.

La clave está en mirar hacia arriba. Los marcos y la parte superior de las puertas no suelen estar en nuestro radar diario, pero atenderlos es un pequeño detalle que mejora tanto la limpieza visual como la salud dentro del hogar.

Si quieres que tu casa esté realmente limpia y el aire más ligero, no basta con barrer o fregar lo evidente: recuerda incluir esos rincones olvidados en tu rutina. Porque muchas veces, la clave para vivir en un entorno más sano está en los detalles que no vemos.