Estafas

La nueva estafa que se expande por Europa y de la que ya alerta la policía

Delincuentes se aprovechan de la amabilidad entre vecinos para cometer fraudes con paquetes falsos. Las autoridades advierten: “Ayude a su vecino, pero no al estafador”

Después de una histórica multa de 70.000 euros, la forma en la que llegan los paquetes a nuestro domicilio ha cambiado para siempre | Fuente: Dreamstime
Delincuentes se aprovechan de la amabilidad entre vecinos para cometer fraudes con paquetes falsos. Las autoridades advierten: “Ayude a su vecino, pero no al estafador”Dreamstime

Cada vez más personas en Europa están siendo víctimas de una estafa que se aprovecha de la buena voluntad entre vecinos. La situación es familiar: el repartidor llega con un paquete, el destinatario no está en casa, y el vecino acepta la entrega para ayudar. Sin embargo, esta cortesía puede convertirse en un problema legal, advierte la policía alemana.

Según el Landeskriminalamt de Berlín, los estafadores utilizan nombres falsos o robados para hacer pedidos en línea, y colocan esos nombres en buzones vacíos o poco usados. Cuando el repartidor no encuentra al supuesto destinatario, confía en que algún vecino aceptará el paquete.

Una vez entregado, los delincuentes se presentan con excusas como “soy familiar del destinatario” o “acaba de mudarse” para recogerlo. En muchos casos, se trata de jóvenes que fingen ser los legítimos receptores.

Lo que muchos desconocen es que, al aceptar un paquete, el vecino se convierte en responsable de su entrega segura. Si el paquete desaparece o no llega al comprador real, el vendedor puede reclamar el importe al último receptor registrado: el vecino que lo aceptó.

La Verbraucherzentrale Niedersachsen (Oficina de Protección al Consumidor de Baja Sajonia) confirma que el comerciante está obligado a reembolsar al comprador, pero puede exigir responsabilidades al vecino que recibió el paquete.

Casos recientes ilustran el alcance del problema. Bernd S., de Berlín, recibió seis pares de zapatos de marca que no había pedido. Su vecina aceptó el paquete, pero él logró interceptar la notificación antes de que los estafadores lo hicieran. En otro caso, Florian D. recibió una carta de una empresa de cobros por una compra que nunca realizó. El paquete fue recogido por alguien más, pero a su nombre, y la factura quedó impagada.

La policía recomienda extrema precaución: no aceptar paquetes para personas desconocidas, prestar atención a nombres añadidos en buzones o viviendas vacías, y reportar cualquier situación sospechosa a las autoridades o a la administración del edificio. Aunque la ayuda entre vecinos es valiosa, en este contexto puede convertirte en parte involuntaria de un fraude.