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Death Stranding - Hideo Kojima firma una superproducción inimitable en lo narrativo y única en lo jugable

El ambicioso proyecto finalmente ha llegado a los comercios de todo el mundo

Death Stranding - Hideo Kojima firma una superproducción inimitable en lo narrativo y única en lo jugable
Death Stranding - Hideo Kojima firma una superproducción inimitable en lo narrativo y única en lo jugablelarazonelstótanoperdido

‘Death Stranding’ es uno de los juegos más esperados del año, quizás el proyecto más deseado de la generación. Desde su anuncio en 2016, nadie se ha permitido el lujo de perderse cada avance o detalle, que con parsimonia se ha ido revelando, permitiendo que la expectación creciera de la manera que tan solo Hideo Kojima es capaz de manejar. El ambicioso proyecto finalmente ha llegado a los comercios de todo el mundo y demuestra con contundencia que no se trata de un juego usual.

Desde entonces, Kojima ha lanzado en dosis homeopáticas los detalles de la obra, que se ha ido perfilando como el bautismo de un género inédito que combina ingredientes conocidos: un universo muy definido, elementos de sigilo, supervivencia, combate, cooperación en línea y no te confundas, mucha paquetería que entregar. No lo demoraremos más: finalmente ha llegado el momento de salir de un mar de dudas.

El comienzo de un largo camino

Para hacernos una idea general, la obra ofrece una experiencia diferenciada que funciona empíricamente, es decir, necesita ser probada para ser entendida y juzgada. Kojima prometió y cumplió: la historia es una de las más complejas jamás representadas en un videojuego. No pretendemos anticipar ningún elemento importante sobre la trama o el argumento, pero no está de más saber que adoptaremos el papel de Sam Bridges, un mensajero cuyo trabajo se centra en el transporte de paquetes de un punto a otro de lo que queda de Norteamérica y reconectar a la humanidad, devastada por Death Stranding, un evento que diezmó la población de la Tierra tras confirmarse que existe un lugar entre la vida y la muerte llamado “playa”, un espacio personal en otra dimensión para cada ser humano. Los Entes Varados (EV) son almas que no pueden acceder a este plano, quedan encallados en el mundo a la caza de cuerpos, y al producirse, desatan una enorme explosión que deja la zona devastada.

Moverse durante las 50 horas por las que se extiende la obra no resulta sencillo para un mundo que todavía convive con los efectos de Death Stranding y una especie de lluvia infectada con un elemento capaz de envejecer aceleradamente todo lo que toca y marcar la presencia de los EV. Estas criaturas invisibles tan solo se pueden detectar gracias al BBPod, el misterioso bebé neonato que portamos en una cápsula y al escáner que lo orienta. Son los enemigos más peligrosos del juego junto a los Mula, libertadores que han perdido parte de su humanidad y solo quieren robar las cargas. Con todo, este espacio deja mucho margen para contar historias paralelas que crean una especie de enorme conjunto narrativo.

Los pocos supervivientes sobreviven en núcleos de población apartados y dependen de compañías como Bridge, donde trabajamos, una asociación presidida por la madre de nuestro protagonista que pretende reestablecer el gobierno. Todo se combina de manera orgánica y tanto la narrativa tiene efectos en la jugabilidad, como, al contrario.

Conexión y vinculación

Como puedes imaginar, la mayor parte del juego te encontrarás transportando carga desde un punto a otro, pero es el trayecto lo que hace interesante el viaje. No falta combate, sigilo, pinceladas de terror y una historia extremadamente cautivadora e impactante. Sin embargo, es importante enfatizar primero la jugabilidad: después de todo, estamos hablando de una campaña muy larga que combina elementos sociales y muchos aspectos relacionados con el personaje, la planificación y los entornos.

Sam Bridges es un repartidor, sí, pero el personaje interpretado por Norman Reedus necesita ser más, ya que debe realizar todo tipo de funciones, desde conectar civilizaciones aisladas hasta construir puentes, pero también te espera acción, temas sobrenaturales, poderes especiales, mitología y muchas leyes naturales que cambian, en definitiva: ciencia ficción extremadamente bien escrita.

Reconectando a la humanidad

Aunque pueda sonar algo aburrido, repartir las diferentes cargas supone un ejercicio realmente desafiante desde la perspectiva del jugador. Hay dos razones para que la fórmula funcione: la primera es como se construye el mundo, las mecánicas y los desafíos; la segunda su vertiente social. Las ubicaciones del juego son amplias y acumulan multitud de retos, desde furiosos ríos hasta montañas para escalar, además de terribles tormentas capaces de dañar todo lo que tocan. Inicialmente, la dificultad se deriva del control de la carga, el peso que Sam puede soportar, la condición de los paquetes (algo esencial) y la energía del personaje, pero estos parámetros cambian lentamente.

Realizar misiones secundarias, cargar muchos paquetes a la vez, entregar todo rápidamente y cualquier otra actividad aumenta los atributos de Sam y recompensa al jugador con mejoras significativas. Pero las misiones principales no son las únicas. Las tareas secundarias ofrecen aún más características y equipo nuevo. Al final de una entrega, Sam obtiene una especie de clasificación, donde se evalúa una serie de elementos, desde el estado de la carga hasta el tiempo de entrega. La constante transformación en las formas en que se producen los envíos se suma al armónico ritmo de ‘Death Stranding’.

En los comienzos, se debe prestar mucha atención tanto al equilibrio como a algunos elementos de supervivencia, ya que un error, por ejemplo, en la planificación del peso, impedirá al personaje escalar a ciertos lugares o huir de enemigos, pero si es inferior y arriesgas poco, el progreso se producirá más lentamente y es posible que no dispongas en el futuro de los materiales necesarios para superar determinadas situaciones. Sin embargo, a medida que avanza la campaña y se completan nuevas misiones, se va sumando equipo, como tirolinas, puntos de carga eléctrica, vehículos y demás elementos destinados a ayudar parcialmente a completar el viaje de Sam.

La gestión y planificación es vital: el personaje tiene un sistema de control de peso y estabilidad de la carga. Si se excede, su velocidad y equilibrio disminuyen, algo que incluso puede afectar la calidad del artículo que se transporta. Con esto, el jugador siempre debe priorizar, desde la carga principal hasta las armas y los elementos esenciales para

la supervivencia. Durante las primeras horas Sam solo se desplaza a pie y solo más tarde, surgen otros medios de transporte y elementos que ayudan a nuestro personaje, pero cuerdas y escaleras son esenciales al principio, a pesar de consumir espacio y añadir peso.

El sigilo es una buena opción

No te confíes, estos nuevos elementos conllevan dificultades imprevistas: los vehículos no pueden subir por determinados picos, tienen la limitación de la batería y la orografía extremadamente accidentada impide planificar muchas estrategias. De hecho, el mundo abierto no se deja explorar, comportándose como un enemigo más, uno que siempre hay que tener en cuenta, por eso es vital calcular la rutas y prestar mucha atención a la planificación. ¿ir por un atajo, escalar montañas y enfrentarse a enemigos o quizá dar un rodeo que podría agotar la energía de Sam? La elección solo depende de ti.

Antes de salir al mundo hay que tener presente incluso las posibilidades de combate, porque el jugador tendrá que cargar con el peso de las armas, que también ocupan espacio, así como las granadas hemáticas que se emplean para hacer frente a las entidades sobrenaturales. Tener demasiados paquetes apilados en la parte posterior, por ejemplo, reduce el sigilo en determinadas situaciones y si el bebé que nos acompaña lo detecta, puede estresarse y resultar inútil si la situación se pone tensa. En ocasiones prepararse para el combate puede convertirse en un ejercicio muy complicado frente a otras soluciones.

Una de las mecánicas más interesantes en combate de ‘Death Stranding’ es que el protagonista puede ser repatriado al mundo de los vivos. Sin embargo, en esta reunión del multiverso entre vivos y muertos, las personas que mueren se conviertan en EV e incluso peor. El enfoque es casi unánimemente no letal, aunque existen alternativas más agresivas con sus respectivas consecuencias. Pero, en definitiva, no se pueden evitar todas las peleas y tendrás que asistir obligatoriamente a combates contra jefes. Estas confrontaciones son bastante sorprendentes y aportan la adrenalina necesaria para acelerar el ritmo.

Pensando en el resto de la humanidad

Esta combinación de características tan solo podría mejorar con la aportación de alguna parte inaudita: el multijugador cooperativo, el segundo elemento que marca el carácter de la obra. Es el segmento más sorprendente de toda la experiencia y refuerza de forma deliciosa el resto de los componentes. No estás solo. El mundo está conectado con todos los jugadores y puedes ayudarte tanto a ti mismo como al resto a lo largo

del viaje. Puedes dejar mensajes en todo el mundo, pero también artículos, edificaciones e incluso paquetes a otros jugadores.

No se puede negar que es muy reconfortante conectarse a una nueva área y encontrar escaleras, puentes e incluso carreteras pavimentadas en el camino, variando el aspecto de lo que podría ser un arduo viaje de regreso. Pero como todo tiene sus matices: tan solo se pueden usar recursos después de conectar cada área a la red que es parte de la trama.

Cualquier elemento construido puede obtener la aprobación de otros jugadores mediante “Me gusta” e incluso recibir solicitudes de ayuda de otro jugador, lo que indica que se requiere a otras personas para que contribuyan con materiales para aumentar el nivel de la estructura. Por lo tanto, debes ayudar para recibir ayuda. En la misma línea puedes entregar paquetes perdidos de otros jugadores, y si tú mismo si no puedes completar el envío, puedes dejarlos en los puntos de recolección para que otros puedan continuar.

Un vistazo a la próxima generación

Los elementos destacados no se detienen aquí, porque ciertamente tener actores de Hollywood de principio a fin ayuda en la inmersión, la veracidad y la empatía por los eventos. Guillermo Del Toro, Madds Mikelsen, Lea Seydoux y muchos otros nombres conocidos realizan sus papeles a la perfección. La práctica totalidad de las escenas roza un nivel de calidad extraordinario, y en contraste con ‘Metal Gear Solid’, el creativo ha optado por dar más peso a las escenas cinemáticas y menos espacio a las narraciones de audio. Sin embargo, leer textos y escuchar documentos sonoros de otros personajes es esencial. Lo mejor: hay cientos de archivos y notas para leer, todas muy bien elaboradas, complementando la aventura y fundamentando el universo tras de ‘Death Stranding’.

En términos gráficos, la obra avanza con cierto rigor por lo que nos espera en la nueva generación de videoconsolas. El juego, si no ocupa el primer lugar de la lista, es uno de los más espectaculares de los últimos años. Las expresiones faciales son increíbles, la distancia de representación del mapa es gigantesca y todo parece extremadamente fotorrealista. A esto se suma una banda sonora sobrada de temas con una vocación expresiva y conmovedora.

Conclusiones

‘Death Stranding’ logra revolucionar y crear un género único. Un juego capaz de marcar una generación con letras doradas desde la experiencia revolucionaria que propone hasta la inabarcable calidad técnica que

atesora. Tampoco le falta una historia original, cautivadora y repleta de excelentes interpretaciones sobre una campaña muy larga, de aproximadamente 50 horas, llena de misiones secundarias y actividades adicionales. La mecánica central de entrega de paquetes es sorprendentemente divertida y tanto el combate como el sigilo aportan el extra y la adrenalina que necesita la producción.

Pone la guinda un apartado gráfico, que, sin duda, es uno de los mejores de la generación y un modo multijugador realmente único e innovador. Se trata de un concepto tan fresco como inesperado y que realmente funciona. Una vez terminada la campaña se pueden pasar decenas de horas mejorando el mundo. Con un mapa más conectado, las entregas se vuelven más fáciles. Y con más entregas realizadas, se obtienen más características. Es divertido y entretenido dar forma a este mundo. De hecho, el concepto puede encajar como un nuevo género.