Acuerdo

Frank Cuesta explica el “ultimátum” de Yuyee con el santuario: “Mis hijos decepcionados; es por dinero, 225 mil euros”

El vídeo del herpetólogo en Kick ya acumula más de 5,25 millones de visualizaciones

Frank Cuesta durante el directo en Kick
Frank Cuesta durante el directo en KickKick

La historia de Frank Cuesta y su exmujer Yuyee acaba de tomar otro rumbo. Tras conocer de boca del herpetólogo la decepción que se llevó por cómo ha gestionado la madre de sus hijos el tema del santuario, y los ataques de miles de personas a la influencer han derivado en algo que parece un acuerdo, pero que Cuesta ha calificado como ultimátum. En un directo en la plataforma Kick que ya tiene más de 5,25 millones de visualizaciones en 12 horas, él ha querido explicar qué suponen estas novedades.

"Os voy a explicar lo que ha pasado bien clarito para que no haya controversias", comenzó diciendo en un directo de apenas 25 minutos, en los que confesaba estar molesto porque "estoy viendo noticias bastante erróneas. Que no haya ningún malentendido". Con imágenes del santuario de fondo comenzó a contar lo sucedido, desde el principio: "Lo que estáis viendo el santuario que yo llamo santuario libertad. Este es un lugar que después de trabajar muchísimo tiempo, desde muy joven y después de comprar una casa y otro terreno, decidí que sería la rubricación de mi carrera y de mi labor como naturista o rescatista, como lo queráis llamar".

Recordemos que tras su último vídeo muchos acusaron en redes sociales a Cuesta de estar "llorando" y que tenía ingresos, que pagara los 3.500 euros que le pedía Yuyee de alquiler. Por eso estas aclaraciones del Frank en el preámbulo del vídeo. Continuó: "Compré este sitio o ahorros que tenia ahí, no todo el dinero; yo dejé un dinero para la familia a mi exmujer para que tuviera gastos. La casa que era de la familia esta a su nombre obviamente, como la tierra y se reformó la casa". Desvela aquí que a principios de este año realizó de su propio bolsillo un desembolso de entre 50.000 y 70.000 euros para esas obras.

Y quiso repetir una idea fundamental de todas las formas posibles: "Siempre ha estado todo cubierto, todos los gastos de mis hijos han estado cubiertos por mí. Mi exmujer ha trabajado pero su dinero ha sido su dinero. Tampoco ha trabajado mucho, la verdad. Quiero dejar bien claro así es como hemos funcionado. Nunca ha habido problemas de dinero, yo siempre lo he pagado siempre todo", y recordó el dinero que costó "con el tema d el cárcel, con abogados con visitas con gente, contratación de gente para que me ayudase. Todos esos gastos los he sufragado yo desde le principio hasta hoy".

Volvió Cuesta al tema de que con la llegada de una nueva pareja, coincidió en tiempo con un cambio de actitud de su exmujer. "Teniamos una relación bastante buena. No tengo nada en contra de la nueva pareja, es una chica trans hombre o como se diga al revés. De repente la relación se ha id enfriando hasta un momento en el que momento en el que hemos llegado a desacuerdo, vamos a llamarlo, en el que ni la casa ni nada se quiere poner a nombre de mis hijos".

Y llegó al meollo de la cuestión en la que desvela el famoso "acuerdo" con Yuyee: "Lo que ha pasado con la tierra es que hemos llegado a un acuerdo, no a mi se me ha dado un ultimátum de o lo tomas o lo dejas". Aprovechó para recordar que cerrar el santuario supondría encerrar a los animales en refugios hasta que él pudiese encontrar otro sitio idóneo para un nuevo santuario.

El "ultimátum"

"Para mí perder el santuario sería una pérdida ecológica personal", confesó Cuesta. "No lo puedo dejar ir, lo he construido con mis manos", dijo emocionado Frank y comenzó el relato de la actualidad: "Yo he estado lidiando estos días. Lo he dicho porque veía que perdía el santuario. He dado varias opciones, he ofrecido 50.000 dólares y que se dividiera en cuatro partes, tres de mis hijos y una para su madre. He ofrecido un 60% para mis hijos y un 40 para la madre, y tampoco. He ofrecido un 49% para la madre y un 51% para lo shijos y tampoco...".

Al final del día, explica Frank, antes de recalcar que no es que haya hecho esto para que se le echen encima los comentarios en redes sociales, si no que "se merece que se le echen encima. No quiero, pero obviamente lo que estoy recibiendo es tan amoral, que el karma, supongo". En ese momento ha leído las condiciones del "ultimátum": "He llegado a una conclusión. No quiero estar molestándote toda tu vida. Has dicho que la tierra cuesta unos 15 millones (de Baths) (unos 389.000 euros). Me está pidiendo 225.000 euros en cuatro veces". Y el mensaje concluye que "cada vez que me pagues un plazo la tierra se dividirá en cuatro partes, una de ellas la pondré a nombre de Zorro".

Frank aclaró que "no es algo que yo quiera, no es algo que yo creo que sea justo, pero lo más triste para mío es que es por dinero. Es por dinero, al final con ese dinero podíamos haber comprado algo en España para mis hijos". Luego habló sobre varías vías que tendría que activar para conseguir dinero, como el crowdfunding. Para terminar habló de la "decepción" de sus hijos ante lo sucedido: "Quieren a su madre, pero yo para mí es un apersona que se ha aprovechado de la situación. ". Y aclaró, que "mucha gente dirá que es chantaje, pero es legal. Yo tengo que recomprar el santuario que pagué y que construí".