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Doñana, acotado por pozos ilegales

Carmen Rodríguez dirige el documental «Doñana: donde el agua es sagrada»

Ejemplar de ave de la fauna de Doñana
Ejemplar de ave de la fauna de DoñanaX

En el rincón suroeste de España, en el corazón de la Baja Andalucía, entre Sanlúcar de Barrameda y Matalascañas, se conserva el último paraíso virgen de la Penísula Ibérica: el Parque Nacional de Doñana. «El coto», como se conoce popularmente a este gran humedal que propicia un ecosistema milagroso, donde se pavonean aves del paraíso, rosados flamencos sin guitarra ni compás, blancas palomas y linces ibéricos, que se enseñorean del lugar, majestuosos, a salvo de los cazadores furtivos.

Un paraíso acotado, amenazado, por la secular sequía que encuentra sus colaboradores necesarios en el cambio climático y en los delincuentes que cavan sus pozos ilegales en las lindes de Doñana para, como parásitos, chupar la sangre y quitarle la vida, es decir, el agua, a este milagro de la naturaleza. No es casual que, por ello, el necesario y bello documental dirigido y escrito por Carmen Rodríguez –y narrado por Odile Rodríguez de la Fuente, hija del entrañable «amigo Félix»– lleve como sutítulo «donde el agua es sagrada».

La gran reserva ecológica

El documental «Doñana: donde el agua es sagrada», producido por los creadores de títulos como «Guadalquivir», «Dehesa» y «Cantábrico», retrata la fauna y flora oculta del parque nacional. Gracias a la técnica del «time lapse» o cámara rápida, se muestra en breves segundos la floración de los jaguarzos blancos y los moriscos, así como de los lirios peregrinos, con el anuncio de que la llegada de los peregrinos de el Rocío está próxima, lo que da paso a escenas impregnadas de tradición.

Es, en definitiva, el retrato de una tierra salvaje, la mayor reserva ecológica de Europa, un lugar donde se cruzan las rutas migratorias de más de trescientas especies de aves que van y vienen al compás de las estaciones. Es la historia de un bosque que crece alrededor de una marisma que se formó entre el mar Atlántico y las orillas del río Guadalquivir. Donde viven algunas de las especies silvestres más amenazadas del planeta. Un lugar en el que a la abundancia le siguen largos periodos de escasez...

El productor de la película, José María Morales declaró a EFE que cree que el espectador «se sorprenderá con un espacio natural lleno de historias que le van a conmover» pues de hecho «lo que pretendemos es que se enamore de este entorno y que sirva para defender un espacio único» como es el Parque Nacional.

«Somos conscientes del momento tan difícil que atraviesan las zonas húmedas en todo el mundo y en concreto Doñana», por lo que este filme es también «una llamada de atención» en la que sus creadores dedican una secuencia a evidenciar las causas de su declive, explicó Morales.