Los Hispanos sufren una baja importante por lesión para todo el Mundial

Malas noticias para la selección española de balonmano: el central Ian Tarrafeta sufrió un golpe contra Montenegro que le va a impedir seguir en el Mundial. Fue reservado contra Chile y en parte se aceleró el regreso de Joan Cañellas, que llegaba tocado por una lesión muscular, pero las últimas pruebas han confirmado lo peor. “Ian Tarrafeta, central de los Hispanos, causa baja en el Campeonato del Mundo de Polonia y Suecia 2023 debido a una lesión en el costado derecho que le impedirá continuar participando en la competición con la selección española. El jugador sufrió una contusión costal en una de las últimas acciones del partido ante Montenegro, y ante la evolución clínica de la misma, se le han realizado pruebas para determinar el alcance de la dolencia. Una vez realizadas las mismas, el diagnóstico ofrecido por el doctor Juan José Muñoz Benito, médico de los Hispanos, ha sido una fisura en la décima costilla del lado derecho”, dice el comunicado oficial de la Federación Española de Balonmano.

Jordi Ribera decidió llamar a Pol Valera, jugador del Fraikin Granollers, para ocupar el sitio, ahora que empieza la parte realmente dura del Mundial. España venció a Montenegro y a Chile en sus dos primeros compromisos. En la primera fase le queda Irán (lunes 16 de enero a las 20:30) y después el nivel de exigencia se multiplica, en un segundo grupo en el que estarán Francia, Eslovenia y Polonia. Sólo dos sacan el billete para cuartos de final. Los Hispanos pierden a un jugador que rebosa imaginación y que en el pasado Europeo, en el que la selección fue plata, fue muy importante. Ese fue el primer gran campeonato de Tarrafeta como internacional y su nivel, como el de Agustín Casado, las dos novedades que entraban por la retirada de hombres como Raúl Entrerríos o Dani Sarmiento, estuvo por encima incluso de lo esperado. “Los nuevos ya somos uno más”, decía Ian en una entrevista con este periódico en ese estreno en 2022, en el que también tuvo un pequeño contratiempo al perderse algunos partidos por covid.

Tarrafeta participó 19 minutos en el primer partido del que es su primer Mundial, tiempo suficiente para demostrar su calidad. Marcó tres goles en cinco intentos y repartió ocho asistencias ante Montenegro. Descansó por precaución ante Chile antes de conocer la desgracia. En ese segundo partido ya tuvieron minutos los que no habían participado. Jordi Ribera es un entrenador que da mucha importancia a las rotaciones para llegar que todos lleguen lo más frescos posibles a los partidos importantes. En Polonia contará con una pieza menos sólo ante Irán... O ni eso: Pol Valera se incorporará al grupo el mismo lunes a mediodía.