Así fue la audiencia del debut de España contra Finlandia en la Eurocopa

Se ha marchado ya Alexia Putellas de la concentración después de quedarse para el primer partido, vivirlo con la camiseta de España con el número 14, el de Torrecilla, celebrar los goles de la remontada con rabia y recibir el homenaje tras uno de ellos. Pero ahora la selección española tiene que caminar sin el liderazgo futbolístico o espiritual de la mejor jugadora del mundo. Las de Vilda deben aprender a hacerse valer como hicieron cuando Finlandia se adelantó en el marcador cuando aún no se había cumplido el primer minuto del encuentro del debut.

«Han venido muchas dudas después de lo de Alexia y que nos metan tan prontito un gol», reconocía la capitana Irene Paredes, que fue la que marcó el gol del empate y la que dio a España la tranquilidad que necesitaba. El tanto de Finlandia fue otro golpe más a una convocatoria que ha empezado torcida para el grupo español. Por eso Vilda insistió tanto en empezar con buen pie el campeonato: eso iba a suponer un golpe de efecto a la moral del grupos. Sin Jenni Hermoso primero ni Putellas después, el liderazgo futbolístico del grupo quedaba en entredicho. Una victoria, con remontada y, encima, a cabezazos ha sido lo mejor que le podía pasar a la selección española. «Contra jugadoras más altas, más fuertes, más potentes si se crean conexiones y sinergias puedes combatir a la fuerza. Contra Finlandia fue así. Eso dice mucho a favor de nosotros porque no tenemos solo una versión para ser capaces de finalizar las jugadas», destacaba Vilda.

Fue un partido que fue visto en La 1 de Televisión Españla por una media de 831.000 espectadores, un 10,4% de cuota de pantalla. Los tres goles de cabeza de Paredes, Aitana y Lucía y el de penalti de Mariona que le dieron la victoria al combinado nacional de Jorge Vilda en Inglaterra fueron vistos en algún momento por 2.191.000 personas. El minuto más visto del partido fue a las 19:26, cuando congregó más de un millón de espectadores, 1.044.000 y 13,7% de cuota.

España está tan acostumbrada a ir por delante en los encuentros que empezar perdiendo en el primer minuto del primer día podía ser la gota que faltaba para romper el grupo, pero lo que se palpaba tras el encuentro es que podía haber sucedido lo contrario: puede que haya sido la gota que necesitaban las futbolistas para sentirse tan fuertes como antes.

Ganar a Finlandia era importante moralmente, pero también matemáticamente porque da un colchón de puntos para los siguientes partidos. El martes llega la prueba definitiva del valor y del futuro de esta selección: Alemania, un equipo del que no se sabe qué esperar, pero siempre fuerte.

En el regres a los entrenamientos en la Abadía de Bisham las titulares realizaron trabajo de recuperación y solo las que no tuvieron minutos o no salieron de inicio se ejercitaron con normalidad