El 70% de los contratos indefinidos no pasa del año

España cerrará 2023 con una tasa de paro del 12,7%, muy lejos del 8% que Pedro Sánchez y su ministra de economía, Nadia Calviño, consideran como tasa estructural que marca el "pleno empleo". Así lo prevé Randstad Research en su informe trimestral sobre predicciones del mercado laboral en el vislumbra "un escenario de moderación en el mercado laboral" con un cifra total de desempleados estimada se mantendrá por encima de los 3 millones.

De hecho, el volumen de parados se incrementará ligeramente en este año, un 0,8%, hasta los 3.050.000, tras un 2022 en el que se redujo un 11,8%, registrándose 3.025.000 personas en esta situación.

Pero lo más significativo es que la reforma laboral no ha servido para acabar con la precarización laboral ni con la temporalidad, como era previsible sin cambios significativos en los modelos productivos.

La supresión del contrato por obra y servicio –que daba empleo a aproximadamente 1,4 millones de personas de promedio en España– y la restricción de otras modalidades de contrato temporal ha disparado la contratación indefinida, a la que han recurrido muchas empresas incluso para cubrir necesidades temporales.

Como consecuencia, destaca Randstad, el número de contratos indefinidos se ha multiplicado por 3,5 respecto a los años previos a la reforma, mientras que la contratación temporal ha experimentado una disminución paralela. Sin embargo, este hecho ha provocado un vuelco en la contratación indefinida, menos indefinida que nunca.

Indefinidos de unos días

Esto es debido al aumento de los contratos a tiempo parcial y, sobre todo, de contratos fijos discontinuos. La que era una figura contractual residual antes de la reforma ha transformado el concepto de trabajador "fijo" y en el conjunto de 2022 su proporción se elevó hasta un 33% de toda la contratación indefinida, ya que se firmaron 2,32 millones de fijos discontinuos desde enero de 2022.

En los primeros cinco meses de 2023 se han firmado 898.000 contratos fijos discontinuos, lo que equivale al 32,1% de los 2,79 millones de contratos indefinidos firmados en dicho periodo.

Esto ha tenido efectos notables en cuanto a la duración de los contratos, remarca el informe. Al restringirse tanto la contratación temporal, se ha recurrido al contrato indefinido para cubrir necesidades temporales, lo que ha tenido como consecuencia el "aumento en la mortalidad de la contratación indefinida".

En 2019 se estimaba que 4 de cada 10 contratos indefinidos no superaban el año de vida, mientras que tras la reforma Randstad Research estima que esta proporción se puede elevar por encima del 70%.

Desde la entrada en vigor de la reforma y hasta mayo de 2023 ya se ha producido un hecho muy significativo: 504.000 personas firmaron más de un contrato indefinido en el mismo mes natural, aproximadamente un 7% del total de personas que han firmado algún contrato indefinido, lo que refleja la proliferación de contratos indefinidos con una duración de apenas unos días.

20 millones de ocupados de promedio

Siguiendo con las previsiones, el aumento de trabajadores ocupados se moderará, tras un 2022 caracterizado por un incremento interanual de 3,8%. De cara a la segunda mitad de 2023, este indicador del mercado laboral experimentará un aumento del 2%, ubicándose en una media de 19,4 millones de ocupados.

A finales de año la afiliación a la Seguridad Social rozará los 21 millones de cotizantes, si bien el promedio anual estimado es de 20,1 millones.

"Tras un 2022 de cifras muy positivas en cuanto a mercado laboral, en la actualidad nos encontramos en un escenario de moderación y de adecuación a las circunstancias normativas y económicas¿, ha señalado el director de Randstad Research, Valentín Bote.