Actualidad

Salario Mínimo

FMI y UE cuestionan las dos reformas «estrella» de Sánchez

El Fondo avisa de que hay que ser «cuidadosos» con la subida del salario mínimo. Bruselas está en contra de ligar el alza de las pensiones al IPC.

La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde
La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagardelarazon

El Fondo avisa de que hay que ser «cuidadosos» con la subida del salario mínimo. Bruselas está en contra de ligar el alza de las pensiones al IPC.

Dados los precedentes vividos a consecuencia de la reciente recesión, parece mala cosa que un gobierno legisle en contra de los designios de la Comisión Europea y del Fondo Monetario Internacional (FMI). Pero eso es lo que parece que está dispuesto a hacer Pedro Sánchez. La subida del salario mínimo interprofesional (SMI) a 900 euros el año próximo –un 22,3% más que ahora– y la revalorización de las pensiones de acuerdo al IPC, las dos medidas «estrella» recogidas en su acuerdo con Pablo Iglesias, no cuentan con las simpatías de ninguno de estos dos organismos internacionales.

La subida del salario mínimo, la principal novedad del acuerdo, chirría en los despachos del Fondo. «Hay que ser cuidadoso con los salarios mínimos. Por un lado para no excluir a gente del mercado laboral. Pero por otro, también hay justificación por cuestiones sociales», aseguró ayer Poul Thomsen, director del Departamento de Europa del FMI en rueda de prensa en la asamblea anual de la organización que tiene lugar en Indonesia, informa Efe. «Uno tiene que equilibrar ambos elementos», agregó.

El programa de Sánchez e Iglesias recoge un incremento del gasto de unos 5.500 millones de euros con el que Thomsen tampoco comulga. En su opinión, dado el abultado volumen de deuda pública española, que supera el 98%, «la política fiscal debería ser más contracíclica», es decir, aprovechar los periodos de expansión económica para ahorrar y reducir el gasto.

En Bruselas tampoco se muestran entusiasmados con el esbozo de Presupuestos que han pactado el PSOE y Podemos. El Ejecutivo comunitario no se opone al aumento del gasto público «per se», pero siempre pide que haya un aumento de la recaudación que pueda sufragarlo y todavía se desconocen los cálculos del Ejecutivo de Pedro Sánchez sobre nuevos impuestos como la conocida como «tasa Google». Sobre lo que sí se ha pronunciado la Comisión en anteriores ocasiones sin ningún tipo de ambages es en contra de ligar en exclusiva al IPC la revalorización de las pensiones, tal y como ha anunciado el Ejecutivo de Pedro Sánchez, ya que considera que esta medida puede hacer peligrar la sostenibilidad del sistema. Una medida que ni la ministra de Economía, Nadia Calviño, ve con buenos ojos.

Mejor que Italia

A pesar de sus reservas, fuentes diplomáticas aseguran a LA RAZÓN que los Presupuestos que presente el Ejecutivo español no van a provocar un choque frontal equiparable al que se prevé entre el Gobierno populista italiano y la Comisión Europea. «Por supuesto que no. La situación es completamente distinta», aseguran las citadas fuentes sobre la posibilidad de que Bruselas tumbe el próximo día 29 de octubre las cuentas públicas españolas.

El Ejecutivo comunitario da por hecho que, si no se produce una rectificación casi milagrosa, procederá en un par de semanas a devolver el anteproyecto de Presupuestos remitido por Roma. Es un hecho insólito y de consecuencias imprevisibles. Por eso, el propósito es controlar los daños lo máximo posible para el conjunto de la zona euro y evitar nuevas tormentas en forma de crisis de deuda. Como muestra de esperanza, el contagio en los mercados financieros parece acotado. El diferencial entre el bono italiano y español es de 200 puntos y esto permite algo de benevolencia con las cuentas españolas.