Pegasus

Robles defiende al CNI pero elude pronunciarse sobre la dimisión de su directora

Asegura sentirse “orgullosa” de sus 3.000 trabajadores y critica que se acuse “sin pruebas”

La ministra de Defensa, Margarita Robles, comparece hoy en la Comisión de Defensa del Congreso de los Diputados en medio de la polémica por los espionajes con Pegasus y con muchas voces pidiendo su cabeza y la de la directora del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Paz Esteban. Sin embargo, Robles ha querido ceñirse al guion durante su intervención y se ha centrado en el orden del día: “La Brújula Estratégica de la UE y sus efectos sobre la proyección de las Fuerzas Armadas en las misiones internacionales”. Únicamente al final ha salido en defensa de los servicios de inteligencia españoles al asegurar, elevando el tono, que se siente “orgullosa de los 3.000 hombres y mujeres del CNI”.

Pero también ha insistido en lo que lleva días apuntando en relación a las supuestas escuchas a políticos independentistas, instándoles a acudir a los tribunales mientras que ha defendido que tanto el Gobierno como los empleados públicos “solo actúan con arreglo a la legalidad”.

Poco antes de acceder a la Sala, la titular de Defensa ha guardado silencio al ser preguntada en varias ocasiones por los periodistas sobre la posible dimisión de Paz Esteban, al tiempo que pedía “dedicar un minuto de tiempo” a comprobar “en las normas” de quién depende la seguridad del móvil del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez: “Todo está en las normas, todo está en la Ley, eso es lo que pasa en Democracia”.

Ya dentro, su discurso se ha centrado en la importancia de la citada Brújula Estratégica de la UE hasta que, prácticamente al final, más seria y elevando el tono, ha salido en defensa del Gobierno, de los trabajadores públicos, de las Fuerzas Armadas, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y, sobre todo, del CNI, cuya directora está en el punto de mira. “Me siento particularmente orgullosa de los 3.000 hombres y mujeres del CNI, que este año celebra su 20 aniversario, y que han pagado también con sus propias vidas, el riesgo y el trabajo de defender nuestra paz, nuestra libertad y nuestra seguridad”, ha dicho.

Acudir a los tribunales

A partir de ahí ha arrancado un alegato en defensa de la legalidad en la Administración al tiempo que animaba, sin mencionarles directamente, a los políticos independentistas a acudir a los tribunales para denunciar ese supuesto espionaje, como ha hecho el Ejecutivo tras conocerse que Sánchez y Robles fueron espiados con Pegasus. “Cuando hay hechos delictivos, este Gobierno acude a los tribunales. No hay nada que ocultar. Si hay conocimiento de un hecho delictivo no deben callarlo ni guardarlo. Hay que ir a los tribunales a denunciarlo”, ha señalado la titular de Defensa.

Porque, ha hecho hincapié en la línea de sus últimas intervenciones, “no podemos aceptar que nadie, con especulaciones y sin pruebas, pueda atribuir ningún tipo de responsabilidad”. Posteriormente se ha felicitado de que mañana se celebre la comisión de secretos oficiales, en la que la directora del CNI, “que aguanta estoicamente imputaciones que no se corresponden con la realidad, podrá decir lo que considere oportuno, que es lo que esta documentado”.

Una vez concluida su intervención, los representantes de los distintos grupos parlamentarios han insistido en preguntar a Robles sobre Pegasus, aunque no estuviese en el punto del día. De hecho, la primera en hacerlo, la diputada de la CUP Mireia Vehí, ha recibido un toque de atención por parte del presidente de la Comisión, el popular José Antonio Bermúdez de Castro: “Una cosa es que se realice algún comentario sobre un punto de actualidad y otra es que la intervención se ciña a asuntos que no competen a esta comisión”. Pero aun así, el resto de parlamentarios han insistido en el asunto del espionaje y muchos de ellos han sido advertidos por el presidente de la comisión.

Pese a ello, Robles sí que ha respondido a alguna de esas preguntas sobre Pegasus para insistir en lo que previamente había dicho: “No se puede hacer imputaciones sin pruebas a quien no puede defenderse” y que “los servicios de inteligencia, las Fuerzas Armadas, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y todos los empleados públicos actúan conforme a la legalidad”.

Al mismo tiempo, ha vuelto a mostrar su “respeto y admiración por los 3.000 hombres y mujeres del CNI”. Y ha añadido que el hecho de haber anunciado que su teléfono y el de Sánchez han sido infectados “es una señal de transparencia”, haciendo hincapié en que “la seguridad al 100% no existe”.