Agentes antidroga piden que se les permita utilizar material antidisturbios contra las narcolanchas

“El Gobierno no nos dota de las herramientas necesarias para combatir el narcoterrorismo. Por no poder utilizar, ni siquiera podemos usar material antidisturbios”, señalan a LA RAZÓN agentes de la Guardia Civil directamente implicados en la lucha contra el narcotráfico.

En un principio, las lanchas del cuerpo iban dotadas de ametralladoras del 12,72, no para disparar contra los narcos, algo que nunca se iba a hacer, sino para poder lanzar ráfagas de advertencia. Portugal, Francia, Marruecos, Estados Unidos y otros muchos países sí las tienen y las utilizan para esos fines. En España fueron desmontadas, Sobre la utilización de las armas reglamentarias, comentan que ni siquiera se pueden realizar disparos disuasorios al aire. La reacción de los narcos sería siempre la de tratar de huir o, en su caso, detener las embarcaciones. “Por eso pedimos, que no es mucho pedir, la utilización de material antidisturbios, además de la adopción de otras medidas legales”.

“La lucha contra el narcotráfico en la actualidad es muy desigual. Mientras ellos avanzan en medios, con narcolanchas cada vez más potentes y robustas, última tecnología en comunicaciones y armamento, a los agentes de la autoridad se les ha mermado considerablemente, y el Gobierno no nos dota de las herramientas que legalmente puedan ser efectivas en combatir y controlar esta actividad criminal”, subrayan.

“A la merma de efectivos, --agregan-- con la desaparición de OCONSUR, dedicados en exclusividad a esta lucha, y la falta de medios, la cual es evidente, hay que añadir las conocidas carencias en capacidad marítima, fundamental para esta lucha”.

“Hay otras medidas que los agentes necesitamos tener para poder aplicar directamente en las actuaciones. Están irían encaminadas en la protección y autorización en la utilización de material antidisturbios en los enfrentamientos, donde las acciones de intervención suelen tener un alto riesgo, al tener enfrentamientos con individuos en ocasiones armadas con armas de guerra”, enfatizan.

Y ponen el punto sobre un otro asunto sobre el que se debe legislar, tal y como adelantó LA RAZÓN: “Otra medida urgente, y que llega tarde, es combatir al narcotráfico, indirectamente, interviniendo sobre su mayor necesidad, que es su escalón logístico. Sería como cortarle el agua a una planta. El transporte de gasolina, conocido como “petaqueo”, es una actividad paralela pero que forma parte dentro de una operación de narcotráfico, pues sin este apoyo logístico no se puede operar. Legislar penalmente sobre esta actividad, es urgente”.

“Hoy en día --recuerdan-- solo supone una sanción administrativa, en el caso que pueda ser abanada por el infractor, siendo en la mayoría de los casos insolvente, resultando una acción policial inocua ante el delincuente. La realidad es que el "petaquero" es un facilitador, en ocasiones perteneciente a la propia organización, y en otras, como organización independiente, paralela, que controla una zona, y se pone al servicio de las diferentes organizaciones que operan en las mismas. Legislar penalmente sobre esta actividad, supondría, dificultar directamente la propia actividad de las narcolanchas, sus operaciones y por consiguiente se estaría incidiendo directamente contra el narcotráfico”.

“Se podría intervenir –apuntan-- la gasolina portada, la aprehensión del medio de transporte, fuera marítimo o terrestre, y la imputación de un delito a los detenidos. Al igual que se legisló contra las narcolanchas, siendo consideradas un género prohibido, el “petaqueo” tenía que ser introducido en el mismo Real Decreto, como actividad facilitadora y necesaria para la actividad de las narcolanchas, y por ende del narcotráfico”.

“Hay una actividad muy grande a la vista de la ciudadanía, --informan-- que hoy día es una alarma social y a la que no se le está prestando la atención necesaria legislativamente. Esta actividad, debe ser considerada delictiv. Para ayudar a los agentes que luchan contra el narcotráfico, habría que legislar sin demora. Las zonas en el Atlántico: Isla Cristina, desembocadura del Guadalquivir y Castillo de Sancti Petri. En la zona Mediterránea: Puerto de Sotogrande, el de la Duquesa y principalmente la zona de Adra, en Almería, son focos altamente activos de esta actividad, la cual se detecta diariamente. Miles de litros de gasolina son transportados hacia las narcolanchas que navegan hacia puntos cercanos donde transbordar el combustible".