Tribunales

"Cuando te coja por la calle te voy a matar": 15 meses de prisión por agredir a un guardia civil en un pub

Los acusados, que admitieron los hechos, deberán indemnizar con 5.233 euros al agente, que estuvo 82 días de baja

Los condenados agredieron a un guardia civil tras negarse a identificarse
Uno de los agentes fue agredido y estuvo casi tres meses de baja por una luxación en un hombroGuardia Civil

El Juzgado de lo Penal número 1 de Huesca ha condenado a 15 meses de prisión a dos jóvenes por atentado contra la autoridad y lesiones por agredir a un guardia civil ante el que se negaron a identificarse tras protagonizar un altercado en un pub de la localidad de Monzón en diciembre de 2019. Ambos han sido condenados además a indemnizar al agente con 5.233 euros. La sentencia de conformidad se ha dictado tras el acuerdo alcanzado por la Fiscalía, con el visto bueno de la acusación particular, una vez los acusados reconocieron los hechos que les llevaron al banquillo.

La resolución que plasma la sentencia in voce adelantada el pasado jueves en el juicio oral da por probado que a las siete de la tarde del 4 de diciembre de 2019, dos agentes municipales de la Policía Local del citado municipio oscense se desplazaron al pub "Límites" alertados por la dueña del local, que se sentía molestada por los dos acusados, D. G. H. y A. H. G. Una vez allí, los agentes les pidieron que se identificaran, "haciendo en todo momento ambos caso omiso a las órdenes policiales", por lo que tuvieron que pedir ayuda a la Guardia Civil.

Dos agentes del Instituto Armado acudieron al local y fueron recibidos con "reiterados insultos y expresiones amenazantes" por parte de los acusados, "braceando y haciendo ademán de entablar pelea con los puños", espetando a uno de ellos : "Me cago en tus muertos, mala raza, que te mato".

Esa "actitud violenta", recoge el fallo, persistió al menos treinta minutos, durante los cuales los acusados "llegaron incluso a intimidar a un cliente del establecimiento" que intentaba calmar los ánimos, sin que los agentes consiguieran calmarles. Lejos de serenarse, "acometieron" a uno de los guardias civiles y "con el propósito conjunto de menoscabar" su integridad física, "le propinaron empujones de tal entidad que consiguieron desequilibrar al agente, causándole un fuerte dolor en el hombro".

Atenuante de embriaguez

Obligados a utilizar sus defensas personales, el otro agente y uno de los policías locales hicieron uso de sus defensas personales "para repeler los empujones que efectuaban los acusados", consiguiendo finalmente reducirlos y echarlos al suelo para proceder a su identificación mientras uno de ellos les amenazaba con expresiones como "me cago en tus muertos, cuando te coja por la calle te voy a matar, ya te cogeré", con intención de volver a levantarse, llegando a forcejear de nuevo con los agentes, aunque finalmente fue reducido "utilizando la mínima fuerza imprescindible".

A consecuencia del incidente, uno de los guardias civiles, que entonces tenía 40 años, sufrió una luxación en el hombro del que tardó en recuperarse plenamente 82 días.

La sentencia considera probado que a consecuencia del consumo de alcohol, los dos acusados "tenían ligeramente disminuidas sus capacidades cognoscitivas y volitivas" en el momento de producirse los hechos, por lo que se les aplica la atenuante de embriaguez(aunque a uno de ellos, A. H. G., también, la agravante de reincidencia pues ya había sido condenado por agresión a un agente, según fuentes jurídicas).

En cuanto al primero, el magistrado acuerda suspender la ejecución de la pena de prisión, dado que no cuenta con antecedentes penales, siempre y cuando no vuelva a delinquir durante dos años y que abone la condena por responsabilidad civil, advirtiéndole de que si incumple cualquiera de ambas condiciones "se revocará la suspensión y se ordenará la ejecución de la pena".

Asimismo, deja en suspenso la decisión sobre la ejecución de la pena de prisión del otro condenado, a cuya defensa da diez días de plazo "para que aporte documentación" y presente sus alegaciones al respecto.

Fuentes de la asociación Independientes de la Guardia Civil (IGC) -que a través del letrado Jorge Piedrafita ha ejercido la defensa del guardia civil herido- muestra su "satisfacción con la elevada condena firme" impuesta "por su contundente acusación, dentro de la línea de trabajo que se desarrolla por la asociación para evitar la impunidad y que salgan muy baratas las agresiones policiales" a agentes que, recuerdan, son "servidores públicos que garantizan la seguridad de la ciudadanía".