El “tamagochi” con el que Belén Esteban combate su diabetes

Desde que le pusieron en su cuerpo una bomba de insulina, Belén Esteban ha ganado en calidad de vida. La “princesa del pueblo” anima “a toda la gente que sufre mi misma enfermedad a que se la ponga porque te cambia la vida.”

Y cuenta la anécdota de que “en mi programa, en “Sálvame”, me dicen riéndose que es como si llevara dentro un Tamagochi, porque la bomba pita cuando tengo el azúcar alta o baja.”

Aunque ha tenido algún que otro “susto”, en estos momentos afirma que su enfermedad está muy controlada. Además, en casa tiene al compañero perfecto, su marido Miguel, que es conductor de ambulancia. Precisamente, se conocieron en un momento en el que Belén padeció un problema de salud. Su marido conducía el vehículo que la llevó al hospital y surgió el flechazo.

El año que está a punto de comenzar puede ser el de su boda por la Iglesia, pero la Esteban quiere esperar hasta que se encuentre totalmente restablecida de la caída que sufrió en el plató de su programa y que le impide andar con normalidad. Por lo menos, hasta abril, debe hacer ejercicios de rehabilitación en un centro sanitario. Si no surgen complicaciones que lo impidan, el enlace tendrá lugar en verano.

Es Miguel quien pone mayor empeño en que esa boda se celebre, porque es un hombre de fuertes creencias religiosas. Y Belén quiere hacer reali