De buen humor
La ironía carcelaria de Bárbara Rey: "Si me meten en prisión, me costará menos vivir, allí lo dan todo gratis"
La artista responde con sarcasmo ante la posibilidad de ser denunciada por sus explosivas memorias
Uno no se imagina a Bárbara Rey en prisión, a pesar de sus explosivas memorias y sus rotundas declaraciones sobre el Rey Don Juan Carlos. Algún as debe tener bajo la manga para que el monarca no la demande. Se dice que guarda secretos que podrían hacerle mucho más daño, que ha contado mucho menos de lo que podría desvelar.
Ella se toma a broma la posibilidad de que acabe en un centro penitenciario, es más, utiliza la ironía y el sarcasmo cuando se le pregunta sobre el tema, y responde divertida con un "sí me meten en prisión me costará menos vivir, allí lo dan todo gratis". Una frase provocadora porque sabe que no tendrá consecuencias.
El gran amor de su vida
A pesar de su pasional historia con el soberano, la vedette está convencida de que el gran amor de su vida fue el domador Ángel a Cristo, padre de sus dos hijos, pero sus adicciones, su carácter violento y sus desprecios, destrozaron un matrimonio que merecía ser feliz.
Aún recuerdo la última vez que estuve con Ángel, fue en un hotel madrileño cercano a la estación de tren de Atocha. Su estado no era lo que se dice normal y le costaba hilar las frases. Me dijo que no se encontraba trabajando bien y que era mejor que nos viéramos el día siguiente. La cita fue baldía. No se presentó ni dio señales de vida. En el hotel me contaron que había tenido un brote de violencia y destrozó los muebles de su habitación. Horas después desapareció dirigiéndose a un destino desconocido. Le quedaban pocos meses de vida. Y Bárbara, a pesar de los pesares, se comportó como una viuda respetuosa y doliente. En este sentido, no se le puede reprochar nada. Primaron los buenos recuerdos por encima del resto,