Juicio

Declaran culpable al padre acusado por el tiroteo que cometió su hijo en EEUU

El joven usó una pistola que compró su padre antes de un ataque en una escuela que acabó con la vida de cinco alumnos

James Crumbley y Jennifer Crumbley, los padres de Ethan Crumbley, autor del tiroteo
James Crumbley y Jennifer Crumbley, los padres de Ethan Crumbley, autor del tiroteolarazonAgencia AP

Un jurado de Michigan llegó el jueves a un veredicto de culpabilidad por cuatro cargos de homicidio involuntario en el juicio de James Crumbley, padre del tirador escolar Ethan Crumbley, quien enfrentaba cargos derivados de la decisión de su hijo adolescente de disparar contra la escuela secundaria de Oxford en noviembre de 2021. Los dos padres fueron acusados de haber permitido que su hijo tuviera acceso al arma con la que cometió el crimen, una pistola que había comprado el padre solo cuatro días antes del tiroteo.

James Crumbley, de 47 años, y Jennifer Crumbley, de 45, fueron acusados ​​cada uno de cuatro cargos de homicidio involuntario tras el tiroteo del 30 de noviembre de 2021 durante el cual su hijo, que entonces tenía 15 años, mató a los estudiantes Tate Myre, de 16 años; Justin Chelín, 16; Hana Santa Juliana, 14; y Madisyn Baldwin, de 17 años, y dejó heridas a otras siete víctimas.

"Este es un caso histórico", dijo el abogado defensor penal Keith Johnson a Fox News Digital, "porque los fiscales buscan responsabilizar a un padre por las acciones de un niño... las acciones violentas que llevaron a la muerte de otros niños. Este es un caso de prueba para ver los límites de la responsabilidad de los padres por las acciones de sus hijos en edad de escuela secundaria".

Johnson añadió que los juicios de James y Jennifer Crumbley "podrían llevar a que los fiscales de todo el país adopten una estrategia similar y responsabilicen a los padres y tutores si se llevan armas a casa y se utilizan en este tipo de incidentes de tiroteos". Los Crumley son los primeros padres en la historia de Estados Unidos en ser juzgados por un tiroteo masivo en una escuela.

El adolescente se declaró culpable de un delito de terrorismo, cuatro de asesinato y otros 19 cargos relacionados con la matanza. En su juicio, declaró que la pistola no estaba bajo llave cuando la metió en su mochila antes de ir al instituto.