Viajes

Dormir en plena Antártida ya es posible gracias a “Echo”

La compañía White Desert Anctartic planea para el próximo mes de noviembre la apertura de seis cápsulas, con una capacidad de dos personas cada una, para descansar en el continente helado.

Interior y vista exterior de una de las cápsulas de "Echo".
Interior y vista exterior de una de las cápsulas de "Echo".White Desert

White Desert Anctartica presenta su última y espectacular iniciativa turística como “lo más cerca que puedes llegar a sentir de estar fuera del planeta sin salir de la Tierra”. Y pueden tener razón. Echo entrará en funcionamiento el próximo mes de noviembre, pero ya se puede reservar una experiencia increíble “inspirada en los astronautas y utilizado por los exploradores”.

El campamento se situará en 71°32′47″S 8°50′11″E, una coordenadas que, con una simple observación, te llevan directamente a la Antártida, el continente helado situado en el Sur del mundo. Allí se instalará seis cabinas, sky pods las llaman, de 20 metros cuadrados cada una, futuristas y lujosas, creadas con fibra de vidrio compuesta con ventanas del piso al techo que permiten a los huéspedes sumergirse en el paisaje lunar que se extiende más allá. Cada una de esas portentosas habitaciones tendrán una capacidad para dos personas, que podrán vivir las sensaciones que vivieron los mayores aventureros de la historia del mundo.

Para decorar esas seis cápsulas se ha requerido la presencia del coronel Terry Virts, excomandante y astronauta retirado, cuyas imágenes tomadas desde la Estación Espacial Internacional se pueden disfrutar en el interior de cada cabina. “Las montañas son las más hermosas que he visto en la Tierra, Venus y Marte”, dijo Virts sobre el espectacular paisaje que se puede contemplar desde los pequeños iglús de Echo.

Hasta la base de White Desert se vuela directamente desde Ciudad del Cabo, en Sudáfrica, y cada expedición, además, está personalizada con una amplia variedad de actividades y puntos destacados, como visitar la cercana colonia donde viven cerca de 30.000 pingüinos o un viaje para sobrevolar el mismísimo Polo Sur.

Lo increíble de la experiencia, claro, eleva los precios, que comienzan desde 780.000 dólares, poco más de 700.000 euros para un grupo de 12 turistas o 65.000 dólares, 59.000 euros por persona. White Desert Antarctica se ha comprometido a utilizar 1.000 dólares por persona y viaje en sus iniciativas de conservación y sostenibilidad. De hecho, Echo está diseñado para ser desmantelado, sin dejar rastro en el paisaje antártico.