Exámenes

Repunte de alumnos que se presentan a la EVAU en Madrid

38.300 estudiantes se examinarán este año de la prueba de acceso a la universidad que mantiene las “facilidades” del “modelo pandemia” y permite el acceso con una materia suspensa. Habrá adaptaciones para alumnos con dislexia

Alumnos en la Facultada de Económicas de la Complutense, tras realizar la EVAU.
Alumnos en la Facultada de Económicas de la Complutense, tras realizar la EVAU.Jesús G. FeriaLa Razón

El próximo lunes arrancan en Madrid las Pruebas de Evaluación para el Acceso a la Universidad (EVAU) y, en esta ocasión, ha aumentado el número de alumnos que se presentan: 38.200 estudiantes, frente a los 37.896 del año pasado, es decir, 300 alumnos más, según los datos que baraja la Consejería de Educación. En esta ocasión, se da la circunstancia de que es posible presentarse a la prueba de acceso a la universidad con una asignatura suspensa, siempre que la media de 5.

De todos los De ellos, 12.704 se van a examinar en la Universidad Complutense; 9.580 en la Autónoma; 5.444 en la Carlos III; otros 4.959 en la de Alcalá; 3.977 en la Rey Juan Carlos; y, por último, 1.548 en la Politécnica.

Los exámenes se realizarán entre los días 6, 7, 8 y 9 de junio, aunque hay una segunda prueba extraordinaria que está convocada entre el 5 y el 7 de julio, a la que podrán acceder también aquellos estudiantes que por circunstancias excepcionales no hayan podido acudir a la convocatoria de junio sin que se vean penalizados en los procesos de admisión.

El lunes comenzará el proceso con las asignaturas troncales en la modalidad de Ciencias; el martes, los de Ciencias Sociales, Humanidades y Artes; durante el miércoles y jueves se llevarán a cabo los de las optativas, mientras que el viernes se ha reservado para posibles incidencias o en aquellos casos en los que un alumno no haya podido hacer por coincidencia horaria.

Horario de examen

En cuanto a los horarios, se realizarán de 9:30 a 11:00 horas, de 12:00 a 13:30 y de 16:00 a 17:30. En la primera sesión del lunes 6 y el martes 7, el llamamiento será a los 8:45 y, el resto de días y sesiones será, al menos, 30 minutos antes de comenzar. Cada examen tendrá una duración de 90 minutos y se establecerá un descanso entre pruebas consecutivas que será, como mínimo, 30 minutos.

Diseño de la prueba

Al igual que en las pruebas de la EvAU celebradas en 2020 y 2021, Las preguntas del examen podrán ser abiertas, semiabiertas y de opción múltiple. Se realizará una prueba por cada una de las materias objeto de evaluación con varias preguntas. Se aplicará el “modelo pandemia”, es decir, el mismo del curso pasado. Habría así una única prueba con más preguntas a escoger por parte del alumno que sustituye al modelo precovid de doble opción para elegir y desarrollar una de ellas. Este modelo no solo servirá para este curso, sino también para el próximo (2022-23) hasta que se aplique el nuevo modelo de Ebau, en 2023-24.

Plan de movilidad

La Comunidad de Madrid ha organizado con Protección Civil y Seguridad un protocolo por el que dispositivos de Policía Local y SAMUR se situarán en el exterior de las sedes para evitar ralentización en las entradas y salidas, según ha informado la Comunidad de Madrid. Igualmente, es recomendable llegar con 30 minutos de antelación al centro para prevenir atascos. Asimismo, el Consorcio Regional de Transportes de Madrid (CRTM) ha puesto en marcha un Plan especial de Movilidad durante estos cuatro días para facilitar el acceso a las facultades.

Se reforzarán los servicios de Metro, Metro Ligero, autobuses urbanos e interurbanos que se dirigen a los campus, así como Cercanías de Renfe. De tal forma que las líneas de 6 y 12 aumentarán la frecuencia de los trenes entre las 7:30 y las 9:30 horas y de 17:00 a 18:00.

En cuanto a la EMT, dispondrá de una oferta de 141 vehículos distribuidos en 13 líneas, además de inspectores en la calle para informar de cualquier incidencia. Igualmente se van a reforzar las 31 interurbanas y nueve urbanas, mientras que Renfe aumentará la frecuencia de Cercanías en función de la demanda.

Por otro lado, se pondrá en marcha un protocolo en los grandes intercambiadores de Transporte para incrementar su seguridad y vigilancia. Se prestará especial atención al cumplimiento de las medidas sanitarias en el transporte público, así como para evitar las acumulaciones en las dársenas.

Alumnos con dislexia

Los alumnos con dislexia tendrán este año menos dificultades para enfrentarse a la prueba. Y es que la Comunidad de Madrid tiene previsto aplicar una serie de medidas y adaptaciones para garantizar la equidad en la educación de los estudiantes que requieren una atención específica y diferente a la ordinaria.

Así, una resolución de la Consejería de Educación, Universidades, Ciencia y Portavocía del Gobierno prevé que se preserve, en todo momento, el anonimato de estos alumnos. ¿Pero cómo distinguirá el profesor que forme parte de un tribunal que el examen que está corrigiendo es de un niño disléxico? Está previsto que se utilicen señaladores en las hojas de examen (pegatinas, gomets...) o cualquier otro método que las universidades estimen adecuado para su identificación.

Durante el examen, se deberá facilitar papel extra al alumno para realizar la prueba, ya que, en muchos casos, «el tamaño de la letra es grande y la direccionalidad es irregular», expone la resolución. Además, si es necesario, se podrá solicitar la lectura de las preguntas por los vocales del tribunal. Incluso se recomienda que se utilice un determinado tipo de letra, como la OpenDyslexic, la Comic Sans o la Arial, con las dimensiones y los espaciados que se determinen más adecuados para facilitar la lectura al alumno.

A la hora de corregir el examen, se tendrá en cuenta el contenido, básicamente y «no se penalizará la extensión menor de lo habitual en las respuestas ni una presentación fuera de lo usual (dirección irregular de la escritura, tachones, diferentes tamaños de la letra...)», expone la resolución de la Consejería.

Tampoco se penalizarán las faltas de ortografía o sintaxis asociadas a errores ortográficos o de expresión escritas más comunes a la dislexia. De hecho, la disposición incluye una guía de errores ortográficos a tener en cuenta para que sirva de orientación al profesor a la hora de corregir el examen. Para el resto de errores de ortografía o puntuación se establecerá un 50% respecto del resto de alumnos ordinarios.

Aquellos alumnos que se encuentren en estas circunstancias deberán solicitar las medidas en el centro en el que hayan cursado sus estudios y tendrán que acreditar el certificado médico que diagnostique la dislexia y que tendrá que haber sido emitido con fecha posterior a los 14 años. Las medidas ya se aplicarán esta convocatoria y en las sucesivas pruebas de acceso a la universidad. Con ello, las asociaciones apoyo a la dislexia ven cumplida una de sus reivindicaciones históricas. Y es que no hay una legislación unificada para este tipo de alumnos en toda España. Así, mientras en unas comunidades había adaptaciones, en otras todavía no se han implantado medidas que faciliten el acceso a la universidad a estos alumnos.