Psicología

La verdadera razón por la que a veces olvidas a qué ibas a una habitación, según la psicología

Ese momento en el que entras a una habitación con un propósito claro… y de repente lo olvidas todo. La ciencia explica por qué ocurre y cómo evitarlo

La verdadera razón por la que a veces olvidas a qué ibas a una habitación, según la psicología
La verdadera razón por la que a veces olvidas a qué ibas a una habitación, según la psicologíaUnsplash

Nos pasa a todos: cruzamos la puerta de la cocina o del dormitorio con una idea en mente y, de pronto, nos quedamos en blanco. Lejos de ser un signo de mala memoria o de distracción crónica, este fenómeno tiene una explicación neurológica bastante interesante.

Los psicólogos lo llaman "límites de evento" (event boundaries). Nuestro cerebro organiza la información en escenas o episodios y cuando hay un cambio claro -de lugar, de actividad, de contexto-, actualiza automáticamente esa "carpeta mental" para empezar la siguiente.

El problema es que, a veces, esa actualización ocurre antes de que hayamos terminado la tarea anterior… y adiós al motivo por el que habíamos cruzado la puerta.

Lo que revelan los estudios

La verdadera razón por la que a veces olvidas a qué ibas a una habitación, según la ciencia
La verdadera razón por la que a veces olvidas a qué ibas a una habitación, según la cienciaUnsplash

Investigadores de la Universidad de Notre Dame, liderados por el psicólogo Gabriel Radvansky, demostraron en varios experimentos que cruzar una puerta física puede actuar como un "borrador temporal" en la memoria a corto plazo.

En sus estudios, los participantes tenían que transportar objetos virtuales de una sala a otra. Curiosamente, su capacidad de recordar qué llevaban en las manos caía justo después de cruzar a la nueva habitación, incluso aunque la distancia recorrida fuera la misma.

En palabras de Radvansky: "Entrar o salir por una puerta crea un límite de evento en la mente. Separa los episodios de actividad y archiva la información anterior". Este mecanismo, que normalmente nos ayuda a mantener la información organizada, puede jugar en nuestra contra cuando interrumpe un recuerdo demasiado reciente.

El papel de la sobrecarga mental

En ese mismo estudio también se demuestra que olvidar algo es más probable cuando tenemos la memoria de trabajo saturada.

Si entras en una habitación pensando solo en "coger el cargador", lo más probable es que lo recuerdes. Pero si al mismo tiempo estás repasando un mensaje, pensando en la cena y recordando un recado… tu cerebro tiene demasiadas pestañas abiertas y es más fácil que el cambio de habitación borre la tarea principal.

Cómo evitar el momento “¿a qué venía yo?”

La buena noticia es que hay formas sencillas de reducir este efecto:

  • Di la tarea en voz alta antes de cruzar: “Las llaves, las llaves, las llaves”. Parece tonto, pero funciona.
  • Lleva un objeto relacionado con lo que vas a hacer, como el móvil si vas a buscar el cargador. Mantiene la intención viva.
  • Haz una pausa mental antes de cruzar. Respira y repite mentalmente lo que vas a hacer.
  • Si lo olvidas, vuelve atrás. Regresar a la habitación inicial suele reactivar las señales visuales y el recuerdo aparece solo.

No es un fallo personal ni un signo de deterioro cognitivo: es simplemente tu cerebro haciendo limpieza para procesar mejor la información. El truco está en ayudarle con pistas más claras y reducir la sobrecarga mental antes de cruzar la próxima puerta. Así, la intención llega intacta al otro lado.