Polémica
Ana Rosa Quintana degrada la relevancia internacional de Pedro Sánchez: "Europa le ha excluido del gabinete de crisis"
Tras la invasión de drones en el espacio aéreo polaco, la maestra de ceremonias ha dictaminado que el presidente del Gobierno tiene dos salidas, "la Polonia europea o el Polonio de Putin"
Micrófono en mano y con voz firme, así ha arrancado esta mañana como cada día Ana Rosa Quintana el programa matinal de Telecinco que lleva su nombre. El editorial de hoy jueves 11 de septiembre ha estado marcado por la invasión de drones en el espacio aéreo polaco por parte de Rusia, lo que provocó que los grandes líderes europeos se reunieran en un gabinete de crisis en el que no estuvo Pedro Sánchez, quien ha perdido relevancia a nivel internacional y que ayer fue abucheado tras acudir a la premier de la última película del galardonado realizador Alejandro Aménabar. Esta degradación de su imagen internacional ha sido el punto álgido del monólogo de la maestra de ceremonias de Telecinco que también recordó la enésima derrota parlamentaria del Gobierno de coalición PSE-Sumar, debido al rechazo de uno sus principales socios, Junts, quien votó que no a la ley estrella de Yolanda Díaz, la reducción de la jornada laboral.
Ana Rosa Quintana abrió su programa con un tono solemne recordando que “Europa está en lucha” tras la incursión rusa en el espacio aéreo polaco y advirtió que “ya no hay espacio para la nostalgia”. Planteó la encrucijada entre “la Polonia europea o el Polonio de Putin”, cuestionando la cercanía del Gobierno a China y el distanciamiento de Estados Unidos e Israel. La presentadora subrayó que “Europa ha excluido a Sánchez del gabinete de crisis de los grandes líderes” y criticó que el presidente solo encontrara refugio en el tema de Gaza para esquivar preguntas sobre corrupción o sobre la imputación de su mujer. También denunció el “insultómetro averiado” del Congreso, que mide de forma desigual las palabras de la oposición frente a los ataques de ministros como Bolaños. Cerró su monólogo recordando que Sánchez no acudió a la cita europea pero sí a votar la reforma laboral de Yolanda Díaz, a la que dejó “más sola que la una”, antes de marcharse al cine con Marlaska. Un gesto que, según Quintana, simboliza a la perfección un “Gobierno cautivo”, como el propio título de la película de Amenábar.