Estupor en redes por las pruebas de anoche en "Supervivientes All Star"

"Supervivientes All Stars" ha generado una ola de críticas por parte de sus espectadores debido al caos en las pruebas para conseguir el Tridente Dorado, un privilegio que otorga un poder significativo al ganador. El programa, que cambió su día de emisión para competir con "El Grand Prix" de La 1, presentó una gala repleta de juegos intensos, pero los problemas técnicos y organizativos empañaron la experiencia. Además en los tramos que coincidió con el programa de RTVE, el concurso del verano consiguió una brecha de más de dos puntos y doscientos mil seguidores con respecto al concurso de Mediaset, 15,2% y 1,5 millones de espectadores frente 13,1% y 1,3 millones.

críticas constantes en redes

Desde el inicio de la gala, los espectadores se mostraron frustrados por los constantes contratiempos. El primer indicio de problemas surgió durante un duelo entre Bosco Blach y Abraham García, el cual terminó de forma abrupta, dejando a Abraham fuera de la competición. Esta decisión controvertida aumentó la tensión entre los seguidores del programa.

El momento más crítico llegó con una prueba en la que los concursantes debían avanzar sobre unos rulos elevados para alcanzar banderas colgantes. Esta dinámica, que prometía ser emocionante, resultó ser una fuente de confusión y frustración. Los rulos se atascaban constantemente, lo que provocó duelos interminables y monótonos para la audiencia. La prueba entre Sofía Suescun y Lola Mencía fue especialmente problemática, y después de 12 minutos de emisión, se interrumpió para publicidad, desorganizando aún más la programación.

La audiencia no tardó en expresar su descontento en las redes sociales, acusando al programa de mala organización y falta de transparencia. Muchos señalaron que los problemas mecánicos debieron ser solucionados por el equipo del programa y no por los concursantes, lo que ralentizó el ritmo y arruinó la experiencia visual.

La prueba final también molesta al público

El descontento culminó con la interrupción de la prueba final, ‘La Noria Infernal’, en la que Bosco Blach y Logan Sampedro competían. Laura Madrueñoanunció que la prueba se detendría para comunicar la salvación semanal, otorgada a Marta Peñate. Esto dejó a los espectadores sin el desenlace esperado, ya que se pospuso hasta la próxima gala, lo que aumentó aún más la frustración.

El cambio de última hora y la falta de resolución de las pruebas clave provocaron que los espectadores sintieran que se les había defraudado, especialmente porque el Tridente Dorado era uno de los principales atractivos de la noche. Las críticas hacia la organización del programa son numerosas, y la audiencia exige mejoras urgentes para evitar que situaciones similares vuelvan a ocurrir.