Disturbios

La Generalitat da por superada la violencia en las calles de Barcelona

El conseller de Interior, Miquel Sàmper, ha hecho balance de los incidentes registrados: el saldo total es de 136 detenidos, 27 heridos y 73 Mossos d’Esquadra lesionados

Queman una furgoneta de la Guardia Urbana de Barcelona durante la manifestación de Barcelona en apoyo a Pablo Hasel
Queman una furgoneta de la Guardia Urbana de Barcelona durante la manifestación de Barcelona en apoyo a Pablo HaselLORENA SOPENA - EUROPA PRESSLORENA SOPENA - EUROPA PRESS

“Yo no he tenido ningún pero, ninguno. He denunciado la violencia desde el primer día. Le guste a alguno o no le guste a ninguno”. Con estas palabras, que ha repetido en varias ocasiones durante su intervención, el conseller de Interior, Miquel Sàmper, ha querido desterrar cualquier atisbo de tibieza en el rechazo a los disturbios de las dos últimas semanas. En una comparecencia en el Parlament, Sàmper también ha dado por superada la ola de violencia en las calles.

“La violencia empezó el día 16 de febrero y acabó el 27 de febrero. Esperemos que realmente haya acabado”, ha asegurado, situando así el sábado pasado como última jornada de los disturbios en Barcelona, día que dejó la estampa de la furgoneta de la Guardia Urbana ardiendo con un agente en su interior. No obstante, ha querido poner de relieve los incidentes desde el mismo 16, cuando saltó la chispa del encarcelamiento del rapero Pablo Hasel. “La violencia ha sido extrema desde el primer día”, ha reconocido Sàmper, que ha hecho un repaso de los incidentes más graves.

En este sentido, ha pedido no quedarse en el recuerdo solo con la impactante estampa de la furgoneta de la Guardia y ha reclamado no olvidar que el mismo 16 de febrero se produjo una de las imágenes más duras de los altercados, como fue el intento de asalto de la comisaría de Vic. Allí, según ha explicado Sàmper, a punto estuvo de “ceder” el edificio tras ser golpeado y destrozado con piedras y puntales de obra. También ha recordado otros episodios, como cuando se prendió fuego a algún semáforo y las llamas estuvieron al borde de extenderse a las viviendas.

Sàmper ha hecho un balance de los disturbios: en total, se han contabilizado 41.675 manifestantes, 375 contenedores quemados, 152 locales que han sufrido daños, 25 daños de otro tipo, 27 heridos, 136 detenidos y 73 agentes de los Mossos d’Esquadra lesionados. Durante la comparecencia en el Parlament, la oposición ha acusado al conseller de ser blando en la condena de la violencia, extremo que ha rechazado y de ahí que haya sido firme hoy en el rechazo a los disturbios.

Trapero

Sàmper también ha reconocido que el mayor Josep Lluís Trapero tuvo voluntad de intervenir en el Parlament la semana pasada para dar explicaciones, pero el conseller ha asegurado que no ha sido posible por cuestiones formales. En este sentido, cabe subrayar que en el seno del cuerpo policial se ha echado en falta una comparecencia de su jefe para dar la cara y arropar las actuaciones de los agentes. No obstante, pese a esta disculpa del conseller, hay voces dentro de la policía catalana que han apuntado desde el primer momento a que el Govern ha impedido dar voz a Trapero para evitar enturbiar las negociaciones de investidura con la CUP.

Modelo policial

El conseller ha vuelto a insistir en que los cambios dentro de los Mossos d’Esquadra como pretende la CUP es mejor dejarlo para más adelante, una vez esté constituido el Parlament. “No es bueno, ni sano, ni saludable debatir ahora sobre el modelo policial en Cataluña”, ha asegurado Sàmper, que apuesta por un acuerdo amplio entre las distintas fuerzas parlamentarias y tras haber escuchado el criterio de los expertos.