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Multado un albergue en Barcelona por tener plantas en la calle

El establecimiento ha presentado un recurso para no pagar los 1.500 euros de multa

Agentes de la Guardia Urbana, en el Raval
Agentes de la Guardia Urbana, en el RavalGoogle

El Ayuntamiento de Barcelona ha multado con 1.500 euros al albergue Safestay, ubicado en el barrio de Sant Pere, Santa Caterina i la Ribera, por la presencia de cuatro plantas en la acera, colocadas allí por vecinos hace varios años. La sanción se produce en medio de la queja de residentes como José Manuel Cetina, quien lamenta en declaraciones a betevé la decisión ya que considera que las plantas aportaban luz y color a un espacio que califica como “estrecho y oscuro”. Además, señala que mientras las plantas han sido retiradas, el lugar sigue siendo un aparcamiento habitual para motocicletas, lo que en su opinión dificulta más la movilidad que los tiestos.

Las plantas, que se encontraban en el Carrer dels Vigatans, eran parte de un proyecto comunitario iniciado por los vecinos antes de la pandemia. Según Cetina y otra vecina, Simone Hausigk, los residentes se encargaban de cuidar las plantas de forma colaborativa, incluso con la participación de los habitantes de una residencia cercana. Ambos vecinos coinciden en que las plantas no representaban un obstáculo significativo en comparación con las motocicletas que a menudo invaden el espacio, a pesar de las señales de prohibición de aparcamiento.

Aunque el albergue Safestay lleva más de una década en su ubicación actual, la multa recayó sobre ellos debido a que las plantas estaban situadas junto a su fachada. A pesar de que previamente informaron que las plantas no les pertenecían, el establecimiento fue sancionado y se vio obligado a retirarlas. En lugar de desecharlas, los responsables del albergue reubicaron las plantas en distintas partes del edificio.

El Ayuntamiento explicó que la inspección fue realizada tras una queja vecinal, lo que activó un expediente sancionador por ocupación de la vía pública sin licencia, una infracción catalogada como muy grave. La multa podría reducirse hasta en un 65% si se paga de forma voluntaria. Actualmente, el albergue ha presentado un recurso que está pendiente de resolución.

Esta no es la primera vez que los vecinos de la zona enfrentan sanciones por decorar el espacio público. El propio José Manuel Cetina relata un incidente previo en el que fue advertido por colocar una bicicleta decorada con flores, aunque en aquella ocasión logró evitar la multa tras mostrar su descontento a los agentes municipales.