Corsarios y mercenarios: el curioso origen de la icónica bandera pirata

Los barcos a lo largo de la historia normalmente almacenaban una variedad de banderas diferentes que se usaban para enviar un mensaje, señalar a otros barcos y para identificarse. Los barcos piratas a menudo llevaban banderas por razones más nefastas, como engañar a barcos cercanos.

Las banderas más famosas que ondeaban los piratas se llamaban ‘Jolly Roger’. La mayoría de estas banderas se decoraban con el símbolo de la calavera y las tibias cruzadas en una bandera negra o eran simplemente negras o rojas sin nada en ellas. Los relatos históricos indican que, si un barco pirata izaba una bandera negra, indicaba que mientras el barco que atacaban se rindiera sin resistencia, se les daría cuartel. Si alguien a bordo del barco se resistía o si el barco intentaba huir una vez que se izaba la bandera negra, se bajaba la bandera negra y se izaba la roja. Esta bandera indicaba que no se mostraría piedad a nadie a bordo del barco que estaba a punto de ser atacado.

Los primeros usos registrados del símbolo de calavera y tibias cruzadas en banderas navales datan del siglo XVII. Posiblemente se originó entre los piratas de Berbería de la época, que conectarían el color negro del ‘Jolly Roger’ con la bandera musulmana negra. Se cree que el origen del nombre en sí se deriva de una adaptación de la palabra inglesa ‘Roger’ que significa vagabundo errante. De hecho, otro nombre para el diablo entre los ingleses en ese momento era ‘Old Roger’ y poner una representación del diablo en estas banderas era bastante común.

Los barcos piratas eran mucho más temidos que otros tipos de embarcaciones enemigas. Con los barcos piratas que ondeaban la bandera negra, tenías que rendirte de inmediato si no creías que podrías ganar. Como los barcos piratas rara vez atacaban al menos que estaban en una buena posición para ganar, había pocas esperanzas para aquellos barcos que desafortunadamente les cruzaban. Esto contrasta con otros barcos donde en cualquier momento podías rendirte y las reglas tradicionales de enfrentamiento te ofrecían cuartel para que pudieras luchar hasta que perder fuera inevitable y luego rendirte.