Investigación

El consumo de opioides, somníferos y cannabis se dispara mientras caen tabaco y alcohol

Una investigación liderada por la Universidad de Santiago revela el auge de los analgésicos con receta, tranquilizantes, bebidas energéticas y cigarrillos electrónicos

Imagen de archivo de medicamentos opioides
Imagen de archivo de medicamentos opioideslarazon.

Un equipo de la Universidade de Santiago de Compostela (USC), en colaboración con el Ministerio de Sanidad, acaba de publicar una monografía que radiografía la evolución del consumo de drogas y sustancias en España durante las dos últimas décadas. El estudio se enmarca en el proyecto financiado por el Plan Nacional sobre Drogas “Detección y vigilancia de los determinantes de las adicciones a partir de datos de encuestas, administrativos y grupos centinela”, dirigido por la profesora de Medicina Preventiva y Salud Pública Mónica Pérez Ríos.

Las conclusiones del trabajo son contundentes: mientras que el consumo de tabaco y alcohol se mantiene estable o incluso muestra descensos, han aumentado de forma significativa el uso de analgésicos opioides, tranquilizantes, somníferos, cannabis, bebidas energéticas y cigarrillos electrónicos.

El auge de los fármacos

Entre 2018 y 2024 la prevalencia de consumo de analgésicos opioides, tanto con receta como sin ella, creció en ambos sexos. El perfil más frecuente en 2024 es el de una mujer de entre 35 y 64 años, sin estudios superiores y nacida en España. La prevalencia siempre fue más alta en mujeres.

También se disparó el uso de tranquilizantes y somníferos, con o sin prescripción médica, en el período 2005-2024. El incremento se registró en todas las edades y sexos, aunque fue máximo en el grupo de 55 a 64 años. Llama la atención que el mayor crecimiento relativo se observó entre los jóvenes de 15 a 24 años. En 2024, la persona consumidora típica era una mujer mayor de 35 años, sin estudios superiores, nacida en España y que no convivía en pareja.

Cannabis en ascenso

El cannabis muestra un patrón muy distinto al tabaco y al alcohol. Su consumo aumentó en todos los grupos de edad y en ambos sexos, tanto en la experimentación como en el uso diario. La prevalencia fue siempre mayor en hombres y en el tramo de 15 a 34 años. En 2024, el perfil del consumidor en los últimos 30 días era un varón menor de 35 años, sin estudios superiores, nacido en España y que no vivía en pareja.

Los investigadores constatan además el crecimiento en el consumo de bebidas energéticas entre 2015 y 2024, solas o combinadas con alcohol, especialmente entre hombres jóvenes de 15 a 34 años. En 2024, el perfil de consumidor corresponde a un hombre menor de 35 años, sin estudios superiores, nacido fuera de España y que no convivía en pareja.

En el caso de los cigarrillos electrónicos, la prevalencia de uso alguna vez en la vida y en los últimos 30 días aumentó entre 2015 y 2024, sobre todo como forma de experimentación. El grupo de 15 a 34 años concentró las tasas más altas. El usuario tipo en 2024 era una persona menor de 35 años, nacida en España y sin pareja.

Tabaco y alcohol, en ligero descenso

Por el contrario, el consumo de tabaco se mantuvo estable entre 2005 y 2022, con un ligero descenso en 2024. El perfil más común de fumador era un hombre de entre 25 y 34 años, sin estudios superiores y sin pareja.

En cuanto al alcohol, no se registraron cambios relevantes en los distintos periodos analizados. En general, la prevalencia fue más alta en hombres, mientras que en mujeres se observaron estabilizaciones o pequeños aumentos. El perfil en 2024 correspondía a un hombre de 25 a 34 años, con estudios superiores y nacido en España.

Respecto al 'binge drinking' o consumo intensivo de alcohol, la prevalencia global se mantuvo estable entre 2005 y 2024. No obstante, en mujeres de 15 a 34 años prácticamente se duplicó durante ese periodo, reduciéndose así la brecha con los hombres. En 2024, por primera vez, la tasa de atracón en el grupo de 25 a 34 años superó a la de los jóvenes de 15 a 24. El perfil más habitual era un hombre menor de 35 años, con estudios superiores, nacido en España y sin pareja.