Realeza
La Reina Letizia recuerda a su abuela Menchu en su día más especial
La veterana periodista cumpliría hoy 94 años
El pasado 27 de julio, la Reina Letizia tuvo que hacer frente a una de las peores noticias para ella. Su querida abuela Mechu Álvarez del Valle perdía la vida a los 93 años. Murió tranquila, en su casa de Sardeu, el pequeño pueblo asturiano que fue su hogar desde que era prácticamente una niña. La monarca estaba muy unida a ella y su fallecimiento le supuso un duro golpe. Hoy la recuerda especialmente porque Menchu cumpliría 94 años. Por primera vez, la esposa de don Felipe no podrá levantar el teléfono para felicitarla desde Zarzuela y preocuparse por su estado de salud, que venía alertando del inevitable final varios meses atrás.
Mantenían contacto telefónico de forma constante, pero también solía visitar a su abuela más de lo que se daba a conocer a la opinión pública. Cuando su ocupada agenda se lo permitía, la Reina Letizia organizaba un viaje exprés hasta Sardeu para reunirse con Menchu Álvarez del Valle junto a sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, y su esposo el Rey Felipe. Las visitas llenaban de alegría a la veterana periodista, que se convirtió en una de las voces más destacadas de la radio asturiana. “Su mayor ilusión era cuando Letizia o Telma le llevaban a sus bisnietas. La palabra orgullo se queda corta”, decía a ‘El Español’ una fuente cercana a la familia.
Menchu Álvarez del Valle no solo fue una abuela para la Reina Letizia, sino que también se consagró como su mayor referente en lo que a la carrera periodística se refería. Ella fue una inspiración para monarca, que siguió sus pasos y llegó a lo más alto de su profesión, hasta que cambió el teleprónter por la corona.
Cuando dio el salto a la Familia Real, Menchu Álvarez del Valle fue una de las que más apoyó a su nieta Letizia en su decisión, y, a diferencia de otros familiares, siempre tenía buenas palabras hacia la monarquía. De hecho, se comenta que la veterana periodista fue cómplice de los primeros encuentros entre la consorte y don Felipe, cediéndoles la intimidad de su casa de Sardeu para que pudieran verse sin llamar la atención de la prensa.
Por esto y por mucho más, la Reina Letizia siempre recordará con cariño a Menchu Álvarez del Valle, pensando, como otros tantos, que los abuelos deberían ser eternos.
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