Familia

Agustín Pantoja, culpable del distanciamiento entre Isabel Pantoja y su sobrina Anabel

Durante la última gira de la tonadillera en América se habrían producido algunos desencuentros entre su hermano y su sobrina

La cantante Isabel Pantoja y Agustín Pantoja en Jerez de la Frontera
La cantante Isabel Pantoja y Agustín Pantoja en Jerez de la FronteraGENGTRES

Aunque Anabel Pantoja intenta quitar importancia a su no presencia en Cantora el día del cumpleaños de su tía Isabel, la realidad es muy distinta. El distanciamiento entre las dos “Isabeles” es más que evidente, y la culpa de los desafueros familiares la tiene el de siempre, un Agustín Pantoja que ha alejado a su mediática hermana de familiares y amigos.

Desde hace años no se habla ni se ve con sus sobrinos Isa y Kiko, lo que significa que ha medrado para que no vayan a la finca a ver a su madre. Y ahora nos enteramos de que ciertos desencuentros con su otra sobrina, Anabel, durante la gira norteamericana de Isabel Pantoja, les han distanciado completamente.

El que algunos califican como el Rasputín de Cantora, según nos cuenta un antiguo trabajador de la finca, “es un hombre poco amigable, algo prepotente y muy intrigante. Apenas tiene amigos y hace una vida solitaria y aburrida. Pero su hermana Isabel le tiene en un pedestal, le consiente todo y no se da cuenta de que la está alejando de sus familiares más cercanos. Isa no le puede ni ver, y Kiko le rechaza totalmente".

Agustín Pantoja en una imagen de archivo
Agustín Pantoja en una imagen de archivoGtres

No se le conoce ninguna pareja sentimental, aunque los rumores apuntan a que podría estar visitando a una persona más joven que él residente en Córdoba. Él siempre ha mantenido su vida personal en el más absoluto silencio, buscando una discreción a prueba, incluso, de paparazzi.

Otra persona que estuvo trabajando al servicio de los Pantoja, le llegó a definir como “un hombre muy desagradable”. Es la misma impresión que han dejado entrever sus sobrinos. Y mientras Isabel no ponga en orden y ataje ese cisma familiar, la tonadillera ni tan siquiera puede ver a las personas a las que más quiere en este mundo, sus hijos y sus cuatro nietos.