Buen momento
Luis Medina, absolución, y ¿campanas de boda?
Absuelto del "caso mascarillas", el hijo de Naty Abascal y el fallecido duque de Feria y su novia continúan con su noviazgo, marcado por la discreción y los rumores de boda
El 19 de marzo de 2025, la Audiencia Provincial de Madrid absuelve a Luis Medina de los delitos de estafa agravada y falsedad en documento mercantil en el mediático «caso mascarillas». Un proceso judicial que puso bajo la lupa la controvertida compra de material sanitario durante la pandemia de la Covid-19 y en el que su socio, Alberto Luceño, ha sido condenado a tres años y ocho meses de prisión por fraude fiscal y falsedad documental. Sin embargo, Medina queda exonerado de todos los cargos y, con ello, se cierra un capítulo de la crónica social y judicial.
Clara Caruana, su gran apoyo
A su lado, en cada audiencia, en cada momento clave del juicio, una figura se mantiene firme: Clara Caruana. Su pareja desde 2023, Clara es descendiente de aristócratas por línea paterna, nieta del barón de San Petrillo y de la marquesa de Villamayor de Santiago. Pero su legado no solo es de títulos, sino también de logros profesionales: desempeña un rol destacado en la gestión sanitaria como gerente de Urología y Project Manager del Cancer Center en la Clínica Universidad de Navarra. El romance entre Luis y Clara se hizo público en octubre de 2023 cuando hicieron su gran aparición juntos en la boda de Victoria de Hohenlohe, duquesa de Medinaceli, en Jerez de la Frontera. Desde entonces, han mantenido un perfil discreto, lejos de los focos, aunque la presencia de Clara en cada jornada judicial de Luis no ha pasado desapercibida. Se les vio juntos el 25 de febrero de 2025, con semblante serio a su llegada a la Audiencia, y nuevamente el 19 de marzo, día de la sentencia, cuando Clara no se apartó de su lado.
Rumores de boda
Con su nombre limpio, Luis Medina ha optado por un retiro mediático, centrado en su vida personal y profesional. La pareja ha sido vista en contadas ocasiones, siempre con una actitud reservada. Esa prudencia no impide que los rumores de boda resuenen con fuerza en su entorno. Fuentes cercanas aseguran que la idea de un compromiso formal no es descabellada y que la posibilidad de un inminente «sí, quiero» es factible. La historia de Luis y Clara es un testimonio de resiliencia y amor en tiempos de adversidad. Mientras él retoma sus proyectos empresariales, Clara sigue siendo su apoyo incondicional. El desenlace de esta historia aún está por escribirse, pero todo apunta a que el próximo capítulo podría incluir un anillo, votos y una celebración rodeada de linaje y exclusividad. Hasta entonces, Luis y Clara continúan viviendo su romance a su manera: con elegancia, discreción y la certeza de que, pase lo que pase, se tienen el uno al otro.