Defensa

Un piloto de guerra chino revela cuál es el último avance del caza J-20 que amenaza al F-35

La aeronave de quinta generación china es capaz de detectar y reconocer los aviones de combate furtivos estadounidenses

Un caza chino J-20
Un caza chino J-20Creative CommonsCreative Commons

El caza furtivo Chengdu J-20, que China puso en servicio en 2017, es uno de los pocos aviones de combate operativos de quinta generación del mundo después de los estadounidenses F-22 Raptor y F-35 Lightning II Joint Strike Fighter y del ruso Sukhoi Su-57. Los medios de comunicación chinos afines al régimen comunista han venido publicando en los últimos días los nuevos avances que el Ejército Popular de Liberación ha llevado a cabo sobre el avión de combate más sofisticado del gigante asiático. Destaca la revelación hecha por un piloto chino del J-20 sobre la nueva y desconocida funcionalidad del también conocido como “poderoso dragón”.

El piloto Yang Chunlei, según ha informado el Diario del Ejército Popular de Liberación, voló un avión de combate J-20 para identificar aviones militares extranjeros que ingresaron a la Zona de Identificación de Defensa Aérea del Mar de China Oriental (ADIZ) de China este verano, y después contó cómo fue su experiencia. Es la primera vez que fuentes oficiales reconocen haber empleado un J-20 para identificar aviones militares extranjeros en el ADIZ de China.

Este paso es fundamental, dice el medio chino, ya que los cazas que son identificados por una aeronave de quinta generación pueden ser destruidos al momento. Los expertos chinos celebraron la noticia porque consideran que Pekín ha dado un paso más para fortalecer sus capacidades defensivas aéreas.

El J-20 incluye un sistema de sensor que tiene un diseño similar al sistema de orientación electro-óptico de Lockheed Martin usado en los F-35 Lightning II. Este elemento mejora la conciencia situacional del piloto y permite que las municiones guiadas por láser sean efectivas, ya que aumentan sus capacidades para atacar objetivos terrestres e interceptar a otros cazas.

 

El J-20 está equipado con un radar de matriz en fase activo aerotransportado que tiene un mayor rango de detección. El uso de este sistema de puntería eléctrico-óptico permite identificar aviones militares extranjeros y hará que el J-20 sea más capaz de hacer frente a los movimientos de los cazas F-22 y F-35 desplegados actualmente en Japón y en Corea del Sur, los dos aliados más importantes de Estados Unidos en esta región asiática.

Una caza chino J-20 de quinta generación
Una caza chino J-20 de quinta generaciónLa RazónLa Razón

El J-20 también podría incorporar próximamente drones de apoyo durante diversas operaciones. Estos drones podrían usarse en misiones de reconocimiento, actuando como señuelo e incluso para bloquear el radar enemigo.

Es un secreto a voces que China podría haber no solo copiado la tecnología de guerra norteamericana. Algunos expertos creen que el J-20 nació de diseños robados al fabricante estadounidense Lockheed Martin para el diseño del F-22 Raptor de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, con el que muestra un notable parecido en el perfil.

El J-20 -diseñado y fabricado por Aviation Industry Corp of China- es el orgullo del Ejército chino y en su país está considerado como uno de los mejores aviones de combate de todos los tiempos. El coronel Zhang Weilin ha dicho que en las maniobras el J-20 ha demostrado ser “sobresaliente en términos de conocimiento de la situación, guerra electrónica y capacidad de colaboración”. Para Zhang, el J-20 “está acelerando la transformación de la fuerza aérea hacia una fuerza estratégica modernizada y también ayudándola a ganar superioridad en la carrera global por una fuerza aeroespacial”.

Desde su entrada en servicio en el año 2017, el J-20 ha usado un motor provisional ruso AL-31, que posteriormente sustituyó por el motor chino WS-10C, también provisional. Este hecho le ha impedido alcanzar su potencial pleno en diversas misiones. A partir de ahora, el exigente caza chino, también conocido como Poderoso Dragón, utilizará motores de alto rendimiento desarrollados íntegramente en China que acentuarán sus principales logros, como son la maniobrabilidad y el sigilo.

La renovación de este poderoso caza chino no se limita al motor sino que también se ha rediseñado el fuselaje, la estructura, las tuberías, los circuitos eléctricos y los subsistemas, según anunció Gong.

El J-20 chino y el F-35 estadounidense son los únicos aviones de su generación que están en producción y desplegados a nivel de escuadrón. Las últimas variantes introducidas en el J-20 en 2021 incluyen una capacidad de supercrucero de la que el F-35 carece y que le permite volar a velocidad supersónicas durante períodos prolongados sin usar dispositivos de poscombustión.

En abril, el ejército chino comenzó a desplegar el J-20 en zonas conflictivas de los mares de China Oriental y Meridional, y en los últimos días el J-20 ha sido desplegado cerca de Taiwán como reacción al viaje a Taipei de la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi.