Segunda Enmienda

El Supremo de EE UU consagra el derecho a portar armas a pesar de la plaga de tiroteos masivos

El Alto Tribunal tumba una ley del Estado de Nueva York que prohibía llevar armas en público

Los nueve miembros del Tribunal Supremo que han fallado a favor de portar armas
Los nueve miembros del Tribunal Supremo que han fallado a favor de portar armasErin SchaffAgencia AP

El Tribunal Supremo propinó este jueves un severo revés al control de armas en Estados Unidos. Precisamente el día después de que se conociera el largamente esperado acuerdo entre demócratas y republicanos en el Senado para aprobar una ley que establezca mayores restricciones y controles a potenciales compradores de armas de fuego en el país, la Corte tumbó una ley del Estado de Nueva York vigente desde 1911 que exigía un permiso especial para quienes portan armas en público.

Los jueces consideraron en su fallo que la ley choca con el derecho constitucional de los estadounidenses a ir armados para defenderse.

La polémica sentencia, que llega pocas semanas después de la matanza de 19 niños y dos docentes perpetrada por un joven de 18 años en una escuela de primaria en Uvalde, Texas, provocó la reacción del presidente, Joe Biden.

Biden se declaró “profundamente decepcionado” por la decisión del Supremo. “Esta sentencia contradice tanto el sentido común como la Constitución y debería molestarnos a todos profundamente”, afirmó el mandatario en un comunicado difundido por la Casa Blanca.

El presidente volvió a lamentarse por lo que considera falta de respuesta de las instituciones ante lo que los medios locales ya han calificado de “epidemia de violencia armada” en EE UU y reiteró su compromiso por hacer “todo” lo que esté en su mano para contener una sangría que solo en lo que va de año se había cobrado 256 vidas hasta finales de mayo, según las cifras del Gun Violence Archive.

“Pido a los estadounidenses en todo el país que hagan oír sus voces en el asunto de la seguridad de las armas de fuego. Hay vidas que dependen de ello”, reclamó Biden, sabedor de que las masacres de este año y la escalada que muestran las cifras han sensibilizado a gran parte de la opinión pública.

De hecho, la indignación y el dolor provocados por la tragedia de Uvalde han sido uno de los factores que han posibilitado el entendimiento sobre el tema entre demócratas y republicanos en el Congreso para aprobar en el Senado mínimas medidas de control después de años de parálisis legislativa por la negativa del partido del ex presidente Trump a restringir el derecho a armarse consagrado en la Segunda Enmienda de la Constitución estadounidense.

El senador demócrata Chris Murphy ha liderado en las últimas semanas unas arduas negociaciones con un grupo de congresistas republicanos para aprobar en el Senado una propuesta que contempla medidas de control a los que los republicanos se han opuesto durante años.

Avance histórico

El martes, el Senado votó preliminarmente a favor de la reforma impulsada por Murphy y se espera que antes de que termine la semana una nueva votación la ratifique, lo que los colectivos de víctimas, activistas y el propio Biden habían celebrado como un avance histórico.

La ley contempla exámenes del historial de quienes compren un arma y periodos de espera para su entrega hasta que hayan sido completados. También establece las llamadas “medidas de bandera roja”, que permiten a los jueces requisar las armas propiedad de los sujetos considerados potencialmente peligrosos para sí mismos o para la comunidad.

La sentencia del Supremo sobre las leyes de Nueva York supone un jarro de agua fría. Aun así, Biden instó a los estados a aprobar en sus territorios lo que califica como “leyes de sentido común” para atajar la ola de violencia.

La de ayer es una nueva fricción entre Biden y los demócratas y la Corte Suprema, que cuenta con una mayoría de jueces de corte conservador desde la muerte de la juez Ruth Nader Ginsburg en 2020. El entonces presidente Donald Trump promovió como su reemplazo por Amy Coney, decantando definitivamente la balanza hacia posturas más cercanas a los republicanos.