Salud

Olvida los remedios: los neurólogos apuestan por otro enfoque para combatir el insomnio

La Sociedad Española de Neurología alerta sobre el negocio millonario de los remedios para el insomnio: productos y terapias sin aval científico que pueden agravar un trastorno que ya afecta a millones de españoles

Tratar la ansiedad y las alteraciones del sueño, por Clínica de la Ansiedad
El insomnio se ha cronificado para un 15 % de la población adultaEuropa Press

Lejos de soluciones milagrosas o remedios que prometen un descanso inmediato, el único tratamiento que ha demostrado una eficacia real contra el insomnio crónico es la terapia cognitivo-conductual. Los neurólogos insisten en que este abordaje, que se centra en modificar las conductas y pensamientos que perpetúan el problema, es una solución sólida y duradera, en claro contraste con la búsqueda de atajos que a menudo resulta contraproducente para el paciente.

De hecho, antes de iniciar cualquier tipo de tratamiento, los especialistas subrayan la importancia capital de un diagnóstico médico riguroso. Esta evaluación inicial es fundamental para descartar otras patologías subyacentes que pueden manifestarse con dificultades para dormir, como la apnea del sueño o el síndrome de las piernas inquietas, afecciones que requieren un enfoque terapéutico completamente distinto.

Por otro lado, la desesperación por encontrar alivio ha alimentado un negocio floreciente. Se trata de una industria que facturó 130 millones de euros en España solo en 2022, y que se apoya en una avalancha de productos que se presentan como la panacea para las noches en vela.

Un mercado de promesas vacías frente al rigor científico

En este contexto, los neurólogos de la Sociedad Española de Neurología (SEN) advierten con contundencia sobre la inutilidad de la gran mayoría de estos remedios populares. Suplementos, aplicaciones móviles, antifaces con tecnología incorporada o dispositivos electrónicos no solo carecen de base científica que respalde su supuesta eficacia, sino que en algunos casos pueden incluso llegar a ser perjudiciales para la salud.

Y es que el problema no es menor. El insomnio se ha cronificado para un 15 % de la población adulta, convirtiéndose en un factor de riesgo directo para el desarrollo de cuadros de depresión y ansiedad. Además, se ha consolidado como una dolencia que eleva considerablemente las probabilidades de sufrir otras enfermedades de envergadura, como la hipertensión arterial o la diabetes.

Finalmente, aunque los fármacos pueden ser una herramienta útil en casos concretos, su uso debe ser siempre bajo prescripción médica. Los especialistas alertan sobre los enormes peligros de la automedicación, una práctica que puede enmascarar la verdadera causa del trastorno, generar una peligrosa dependencia o provocar efectos secundarios indeseados que agraven la situación inicial en lugar de resolverla.