La resurrección política de la marea blanca en Madrid a 200 días de las elecciones

Para la mañana de este domingo está convocada en la capital una manifestación que, según sus impulsores, busca defender la sanidad pública frente a lo que consideran que es un «plan de destrucción de la atención primaria» por parte de la Comunidad de Madrid. Esta protesta llega en mitad de las negociaciones abiertas entre la Consejería de Sanidad y cuatro de los cinco sindicatos con representación en la Mesa Sectorial –el viernes el Gobierno regional les trasladó una nueva propuesta para la apertura normalizada de los centros de atención continuada– y se produce, además, en un contexto en el que el sindicato mayoritario de médicos, Amyts, ha convocado dos huelgas, una en los centros 24 horas –que ya ha comenzado– y, otra, en la Atención Primaria, cuyo inicio está previsto para el próximo día 21. Y, como casi nada escapa de la política, esta marcha recorrerá el corazón de Madrid cuando quedan apenas 196 días para las elecciones municipales y autonómicas del próximo 28 de mayo.

La líder de Más Madrid en la Asamblea regional, Mónica García, vinculó ayer la manifestación de mañana con la cita con las urnas del 28-M para exigir a la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, «que se vaya» si la manifestación de este mediodía es multitudinaria: «Quedan apenas seis meses para echar de la Puerta de Sol a quienes quieren mal a las madrileñas y madrileños. Vamos a ello con toda nuestra pasión, entusiasmo y orgullo de Madrid», señaló en Twitter. La cita en Cibeles viene a suponer la resurrección de la marea blanca en Madrid, un paraguas bajo el que se agrupan asociaciones sanitarias. Considerada en su día, por sus propios impulsores, como «la hija mayor del 15M», la marea blanca ya protagonizó importantes movilizaciones contra los gobiernos de Esperanza Aguirre, Ignacio González y Cristina Cifuentes.

Fue en el año 2012 cuando echó a andar. Solo unos meses después de que el movimiento de los indignados que acampó en la Puerta del Sol se convirtiera en portada de los periódicos de todo el mundo. En torno a esta marea blanca madrileña, surgió un buen número de asociaciones y colectivos. Algunos especialmente activos, como la Asociación de Facultativos Especialistas de Madrid (AFEM). La actual portavoz de Más Madrid en la Asamblea regional, Mónica García, fue una de las impulsoras de la asociación junto a facultativos como Carlos Castaño y Belén Padilla. «En Madrid estamos organizando una asociación independiente de facultativos. Somos AFEM», anunciaba en ese momento a través de Twitter la actual portavoz de la oposición a Ayuso.

García creó entonces las tertulias sanitarias junto a Asunción Rosado –que formará parte del equipo de Miguel Ángel Sánchez Chillón en el Colegio de Médicos–. Ambas, Rosado y García, comienzan entonces a fortalecer los lazos entre colectivos que apoyan a la marea blanca. Los dirigentes de Amyts y AFEM, entre otras asociaciones, se convierten en habituales de estas tertulias junto a destacados portavoces socialistas en el ámbito sanitario como Rafael Bengoa y José Manuel Freire.

Otros rostros conocidos de la sanidad en la región también apoyan el alumbramiento de AFEM, jugando un papel importante en su trayectoria desde entonces. Es el caso de Mar Noguerol, integrante de su Junta Directiva. En la arena política, Noguerol formó parte de la candidatura de Podemos al Ayuntamiento de Fuenlabrada en las elecciones de 2019. Ángela Hernández Puente, actual secretaria general de Amyts –sindicato que ha llamado a las dos huelgas de médicos convocadas actualmente– también animaba en aquel momento a través de las redes sociales a los facultativos médicos a unirse a la asociación impulsada por Mónica García.

Con motivo de las elecciones al Colegio de Médicos de Madrid (ICOMEM) de 2016, los vínculos entre AFEM, el sindicato Amyts y el equipo que finalmente gana esos comicios se estrechan. Miguel Ángel Sánchez Chillón lidera esta candidatura y se convierte en presidente tras no haberlo conseguido en 2012. Tanto Amyts como AFEM apoyaron esta lista, surgida tras la creación cuatro años antes de la plataforma Médicos en Madrid. Crítico con el Gobierno liderado por Cifuentes, Sánchez Chillón designó a Belén Padilla como vicepresidenta de la institución. En 2012, Padilla fue, además de miembro de Afem, una de las impulsoras de una «marea blanca nacional» tal y como defendía por entonces en las redes sociales: «Hay que parar el sinsentido, la especulación y el lucro con la salud. Juntos PODEMOS». De Padilla elogia Mónica García en su reciente libro «Política sin anestesia» su liderazgo en la articulación de la marea blanca.

En mayo de 2016, el Colegio de Médicos, Amyts y Afem se unen para denunciar la «alarmante» precariedad de los médicos en la región. Solo un mes después, las protestas llegan a los centros de salud. También a la Consejería, mediante una protesta liderada por Julián Ezquerra –por entonces, secretario general de Amyts, Belén Padilla –ex de Afem y vicepresidenta del Colegio de Médicos–y Carlos Castaño, presidente de AFEM. A lo largo de 2017, el ICOMEM y los dos colectivos médicos endurecieron su discurso contra el Gobierno de la Comunidad de Madrid: coinciden en afirmar que Cifuentes da la espalda a los médicos y se oponen a que centros privados contribuyan a solucionar el problema de las listas de espera. Se reanudan las movilizaciones convocadas por los sindicatos en noviembre de ese año.

Y en 2018, se concreta una nueva huelga. Convocada por Amyts, respaldada por AFEM y el ICOMEM. Con Enrique Ruiz Escudero ya como consejero de Sanidad y con Mónica García, ya como diputada de la oposición, en ese momento en la bancada de Podemos. Con los mismos actores protagonistas de hoy. Y entonces, como hoy, también estábamos en el año previo a unas elecciones autonómicas.