Este es el primer coche Google

Podríamos decir que ha llegado a las carreteras de España el primer vehículo eléctrico con Android Automotive o el primer coche Google. Se trata del Polestar 2, una competencia directa a Tesla. Es cierto que ya existe Android Auto, que facilita la integración con aplicaciones como Google Assistant, Maps, Spotify y otras opciones de entretenimiento, pero la diferencia es que el sistema Android Automotive está integrado directamente en el coche: no precisamos de la conexión del móvil para acceder a las aplicaciones. Por si fuera poco el Polestar 2 incluye la última versión, Android Automotive 11.

La integración entre sistema operativo y sensores propios del vehículo eleva las capacidades del mismo más allá de la potencia que podría tener si solo dependiera del móvil. Por ejemplo, hay sensores exteriores que aprovechan la información de Google Maps para combinarla con los movimientos que detectan e identifican a peatones, atracciones turísticas y otros vehículos… en tiempo real. Mientras esto ocurre, los sensores en el interior pueden avisarnos si estamos cansados para conducir o si no estamos mirando la carretera, gracias al seguimiento ocular.

La apuesta no es extraña. Polestar es propiedad del grupo chino Geely, que a su vez es también accionista mayoritaria de Volvo, la empresa sueca que aseguró que en 2030 sería una marca totalmente eléctrica.

¿Qué incluye la actualización de Android Automotive 11? Se ha mejorados la estabilidad de la conexión, tanto a la red como a radio y GPS. En este último caso, si se cambia el perfil del conductor se interrumpe la navegación. Información en tiempo real durante la carga y de la carga en todo momento. Finalmente se han hecho mejoras, desde la aplicación Polestar, para tener un mayor control sobre las cualidades de confort (asientos, clima, etc.) dentro del vehículo.

Hay que recordar que Polestar es un vehículo eléctrico de altas prestaciones que incluye una cámara de 11 pulgadas (dispuesta en vertical), puede abrirse con el teléfono móvil, cuatro conectores USB-C de serie y también carga inalámbrica y una autonomía que llega a los 542 kilómetros. Su sistema de carga rápida permite que en unos 15 minutos tengamos para 100 kilómetros más y en menos de una hora se pasa de un 10 a un 90% de carga de la batería.

Teniendo en cuenta que su producción comenzó en marzo de 2020, ya se ha colado entre los los 10 coches más vendidos en Noruega, el mercado más competitivo en este sector ya que el 65% de las ventas de vehículos son de coches eléctricos.