Estreno

Grandes mujeres que cambiaron la historia mundial

El Canal Historia ha puesto el foco en seis reinas poderosas e inspiradoras, cuyo impacto social fue abrumador

Reina Victoria de Inglaterra
Reina Victoria de InglaterraLa Razón

Por mucho que la historia parezca querer ocultarlas, miles de mujeres se han ganado a pulso un lugar en ella, ya sea levantándose desde las posiciones más humildes o erigiéndose como soberanas absolutamente influyentes, capaces de cambiar del devenir de los acontecimientos. Biografías que merecen ser estudiadas con detenimiento y en las que AMC SELEKT, a través de su Canal Historia, ha decidido poner el foco con la nueva serie documental “Las reinas que cambiaron el mundo”.

Se trata de seis capítulos dedicados a seis monarcas de alrededor de 45 minutos cada uno, que se estrenan de dos en dos a partir de este 7 de noviembre y durante los siguientes martes hasta completar los seis episodios de esta temporada.

Esta docuserie analiza en profundidad la vida de soberanas como Isabel, Ana y Victoria, cuyo impacto en el Reino Unido ha sido decisivo, pero que han sido tratadas prácticamente como si fuesen actrices secundarias. Sus nombres, así como los de Hatshepsut, en el antiguo Egipto, Boudica en la Britania del siglo I y Leonor de Aquitania, parecieran permanecer ocultos para muchos, como si bastase con centrar la mirada en otras historias más conocidas como las de Cleopatra, Nefertiti, Juana de Arco o Catalina la Grande por mencionar las que más atención reclaman. Por eso esta propuesta del Canal Historia resulta no sólo interesante, sino muy valiosa, pues pretende ser el inicio de un camino que nos puede abrir los ojos ante los grandes logros alcanzados por miles de mujeres que nuestra historia ha silenciado y cuya inteligencia, liderazgo y capacidad ha sido inspiradoras.

El primer episodio estará dedicado a Isabel de Inglaterra, quien, como monarca protestante, otorgó a los católicos la libertad de practicar su fe siempre y cuando lo hicieran discretamente y demostraran lealtad. Durante su reinado, Inglaterra experimentó un período de paz y prosperidad, lo que propició un florecimiento de la cultura inglesa. Bajo su gobierno, se sentaron las bases para la futura expansión del imperio británico a través de las hazañas de personajes como Francis Drake y Walter Raleigh.

Ana toma el protagonismo en el segundo capítulo. Al acceder al trono en 1702, ella se inspiró en el ejemplo de Isabel I como su guía. Como la última soberana de la dinastía Estuardo, destacó por su incansable dedicación, siendo considerada una de las monarcas más laboriosas que haya tenido el país. Además, ostentó el título de la primera reina de Gran Bretaña tras la unión de Escocia e Inglaterra, y durante su reinado, el país emergió como una de las potencias más influyentes en el escenario internacional.

Y para cerrar el círculo británico, veremos cómo, durante el reinado de Victoria, Gran Bretaña experimentó un período extraordinario en su historia caracterizado por una notable expansión en los ámbitos industrial, social y territorial. La reina también logró transformar la percepción pública de la familia real, pasando de ser considerada una institución derrochadora y obsoleta a ser vista como un elemento valioso en la sociedad británica.

En la cuarta entrega conoceremos a Hatshepsut, una de las gobernantes más poderosas y exitosas en la historia de Egipto, que desafió las convenciones de su época y optó por que se la representara como un rey con barba en lugar de una reina. Esta destacada faraona supervisó gigantescos proyectos de ingeniería, como el templo de Deir el-Bahari, y promovió el desarrollo de importantes rutas comerciales en toda la región. Además, encabezó expediciones que contribuyeron a la creación de riqueza y arte en Egipto.

Luego pasaremos a Francia, donde Leonor heredó el título nobiliario de su padre y una inmensa fortuna. Conocida por su firmeza y determinación, ejerció una gran influencia en las decisiones del rey Luis VII, con quien se casó, llegando incluso a acompañarlo en la Segunda Cruzada a Tierra Santa en 1147. Tras la anulación de su matrimonio con Luis, Leonor contrajo nupcias con Enrique Plantagenet, heredero del trono inglés. Como reina de Inglaterra, veló por los intereses de Enrique durante sus frecuentes ausencias.

Finalmente, descubriremos a Boudica, quien se levantó frente a los opresores romanos en Britania y forjó una coalición de tribus enemistadas para marchar hacia Colchester, la capital de la Britania romana, y reducirla a cenizas. A esta victoria le siguieron Londres y Saint Albans, antes de la derrota en donde perecieron alrededor de 80,000 soldados romanos. No obstante, su resistencia culminó en la batalla de Watling Street, donde perdieron la vida 200,000 britanos.