Tezanos fuerza al límite los datos del CIS y dispara al PSOE

El prestigio del Centro de Investigaciones Sociológicas vuelve a quedar en entredicho. Desde que José Félix Tezanos llegara a la presidencia de la institución de la mano de Pedro Sánchez, la credibilidad de sus sondeos ha ido cayendo en picado: barómetro tras barómetro los resultados se han ido alejando del resto de las encuestas que apuntan tendencias ignoradas sistemáticamente por el centro público. Las críticas son unánimes al denunciar, como ya vienen haciendo buena parte de los expertos más reputados en demoscopia, la falta de rigor científico que parece regir ahora el organismo público. Y es que, los datos constatan además, que sus estimaciones coinciden en pleno con los intereses de su partido, a pesar de que luego no se corresponda con la realidad, como han ido demostrando las distintas elecciones celebradas en los últimos años. La clave está en subestimar a los partidos del bloque de la derecha y sobreestimar a los de izquierda. La realidad, sin embargo, es tozuda y en cada proceso electoral, las urnas han desmentido al CIS.

Este lunes, el barómetro del CIS volvió a disparar el sesgo a la izquierda en sus encuestas parainflar los pronósticos del PSOE. Según el barómetro publicado ayer, el PSOE ganaría con el 32,7% de los votos, cuatro puntos más que el PP, que se quedaría con el 28,7%, contradiciendo así al resto de sondeos que otorgan una clara victoria al PP. Unos datos que difieren, sin embargo, de la estimación que técnicos que han pertenecido al CIS han hecho. Según estos datos que se ajustan al sesgo muestral, los socialistas habrían obtenido en la misma encuesta un 24,1% de los votos, es decir un 8,6% menos de lo que asegura la encuesta publicada. Datos que darían la vuelta a la encuesta y colocarían a los populares como partido más votado. El PP debería haber conseguido, según estos datos, un 1,5 por ciento más, llegando hasta el 30,2% de la estimación de voto y encabezando el barómetro. Pero esta circunstancia, de desviar las estimaciones a favor de la izquierda, también afectan al resto de partidos. A Unidas Podemos, Tezanos les ha otorgado un 12,7% en la encuesta oficial, sin embargo, con la apreciación correcta se habrían quedado en el 10,9%. Cs, que sigue estancado, se mantiene para Tezanos en el 2,7% de los sufragios, pero habría obtenido 1,1 puntos más. Vox debería subir hasta 7,8 puntos, es decir, conseguir un suelo del 16,6%.

Esta circunstancia no es singular, sino que viene produciéndose, desde 2019, según los datos consultados por este periódico. Momento en el que el CIS comenzó a sobreestimar a la izquierda y que se ha sucedido hasta en 22 elecciones. En concreto, a Vox, en 17 de 22 comicios. Por ejemplo, en Castilla y León, el CIS solo vaticinó un 11% para los de Santiago Abascal. Finalmente, en la encuesta verdadera –las urnas– lograron en 18%. Al PP le subestimó en 14 comicios.

Desde 2021, son tres las elecciones en las que las estimaciones del CIS han fallado, como en la Comunidad de Madrid, donde todas las encuestas privadas colocaban al PP y Vox a gran ventaja de la izquierda. El 4-M, la desviación a favor del PSOE llegó a los 15,8 puntos, según los datos que denunció ayer el presidente de GAD3, Narciso Michavila, a través de una tabla con las desviaciones a favor de la izquierda. Igual que ocurrió en las elecciones de Castilla y León –solo el CIS daba como ganador al PSOE– sobrevalorando en hasta 5,6 puntos el voto de PSOE y Unidas Podemos. En Andalucía, se subestimó al PP al no saber detectar la mayoría absoluta de Moreno Bonilla y disparó el sesgo a la izquierda hasta el 10,7%.

Así, desde PP y Vox se restó credibilidad al sondeo «al servicio del PSOE», mientras que desde el Ejecutivo aseguraron que se confirma que el «efecto Feijóo» se desinfla y defienden que se debía al «desconocimiento» sobre el nuevo líder de la oposición tras la salida de Pablo Casado.