Los hijos de Berlusconi, desesperados porque su padre coleccionaba arte sin tener ni idea

La familia de Silvio Berlusconi lleva cuatro meses afrontando el duelo de su pérdida, pero también los tediosos trámites que supone gestionar su ingente fortuna. El expresidente italiano coleccionó millones de euros como si de cromos se tratase, lo que gastó en disfrutar de los placeres de la vida, además de en joyas inmobiliarias, vehículos de lujo y también piezas de coleccionistas. Y es que el controvertido político era un amante del arte, aunque quizá no era del todo un experto a la hora de comprar, lo que están descubriendo ahora sus hijos.

Sus herederos están sufriendo un gran quebradero de cabeza a la hora de vender las cerca de 25.000 obras de arte que atesoró su padre, pues muchas tienen un valor muy bajo, lo que dificulta sacarle una rápida rentabilidad y que no acumule polvo, como así está sucediendo ahora mismo. Y es que a la espera de saber con exactitud qué harán con ellas, están apiladas en un almacén frente a Villa San Martino, la vivienda principal de Silvio Berlusconi en Arcore, Milán. Pero eso no es un trastero y tan solo mantener esta colección de arte aparcada supone un gasto a los hijos del mandatario la friolera de 800.000 euros al año, como así han señalado desde el diario ‘La Repubblica’.

La gran mayoría de las piezas son pinturas, dedicadas casi en su totalidad a ensalzar el desnudo femenino y también la figura de la Virgen María. Silvio Berlusconi se aficionó a adquirir este tipo de obras de madrugada, a través de programas de subastas en televisión, y que supusieron uno de sus grandes entretenimientos a partir de 2018 cuando el insomnio trastocó su rutina. Así lo contaba su íntimo amigo Vittorio Sgarbi en el programa ‘Report’, asegurando incluso que el expresidente ha llegado a dilapidar hasta 20 millones de euros de su fortuna en este caro hobby. Además, sin tener una sensibilidad especial para hacer buenas inversiones en arte. Algo permitido teniendo en cuenta el respaldo que supone saberse dueño de una fortuna estimada en 8.600 millones de euros, según ‘Forbes’.

Aunque les está costando horrores saber qué hacer con las 25.000 obras de arte que acumuló su padre, los hijos de Silvio Berlusconi tampoco tendrían de qué quejarse. A los cinco vástagos del político y magnate de los negocios los ha dejado un futuro bien blindado. En su testamento establecía que les dejaba Mediaset, valorado en 6.000 millones de euros, además de su club de fútbol, sus ingentes joyas inmobiliarias y demás propiedades de incalculable valor. También sus obras de arte, quizá no las mejores, pero sí una gran cantidad de ellas y que pueden subastar al mejor postor para recuperar parte de lo invertido.

Quizá estén más agradecidos Marta Fascina, la pareja de Silvio Berlusconi, que se hizo dueña de 100 millones de euros tras la muerte de su amado. También su hermano Paolo Berlusconi se llevó idéntico pellizco. El resto fue a parar íntegro a sus cinco hijos, que ahora se quejan de que no saben muy bien cómo gestionar tanta pasión por las pinturas sobre la Virgen y las mujeres desnudas. Mientras lo descubren, la fortuna mengua, aunque no sea alarmante para ellos, a razón de 800.000 euros el año. El tiempo corre y el dinero se gasta…