Cauta

Rocío Carrasco se acobarda: el importante paso que aún no se atreve a dar

La hija de ‘la más grande’ ha vuelto a la escena mediática con todo lo que eso conlleva, pero hay algo por lo que no está dispuesta a pasar

Rocío Carrasco en una imagen reciente
Rocío Carrasco en una imagen recienteGtres

Tras el éxito cosechado por ‘Rocío, contar la verdad para seguir viva’, la serie documental que congregó a millones de espectadores frente a sus televisores, la heredera universal de la Jurado ha vuelto a la esfera pública por todo lo alto, con la confianza que había perdido en los últimos veinte años a raíz de las acusaciones que su exmarido, Antonio David Flores, vertió sobre ella en los platós de televisión. La hija de Pedro Carrasco “ha renacido”, como el ave Fénix que lleva tatuado en su espalda y que ya se ha convertido en un icono.

Tras años de silencio y hermetismo, Rocío Carrasco vuelve a sonreír a las cámaras de televisión, atiende a los medios y responde sin tapujos a las preguntas más comprometidas. El mayor paradigma de este regreso a la esfera pública se encuentra en su fichaje por ‘Sálvame’, el magacín vespertino de Telecinco que durante tanto tiempo ha dado voz a Antonio David Flores y que ahora busca resarcirse otorgando a la hija de ‘la más grande’una sección propia: ‘Hable con ella’. Se trata de una espacio en el que compartirá la opinión de los espectadores del programa acerca de los colaboradores, así como historias de otros rostros conocidos que, como ella, han sido silenciados a lo largo de un periodo de tiempo.

Rocío Carrasco en su debut en 'Sálvame'
Rocío Carrasco en su debut en 'Sálvame'Mediaset

En su debut, Rocío Carrasco estuvo al pie del cañón a lo largo de tres intensas horas en las que las llamadas de los espectadores ocuparon un segundo plano y sus conflictos familiares tomaron el papel protagonista. La empresaria sabe donde se ha metido y es consciente de que ‘Sálvame’ no tendrá miramientos con ella. Ha ido a por todas y con todas. Sin embargo, en este regreso estelar a la pequeña pantalla y al foco mediático, hay un importante paso que la madre de Rocío y David Flores todavía no se atreve a dar.

Rocío Carrasco se muestra reacia a crear un perfil en las redes sociales. De momento, no quiere abrir esa ventana y su presencia en Twitter o Instagram es inexistente, a excepción de las numerosas cuentas de club de fans que la apoyan en el mundo cibernético. La empresaria conoce los riesgos de este tipo de plataformas, en las que los usuarios tienen vía libre para insultar, atacar e incluso amenazar, escondidos bajo el cobarde disfraz del anonimato. Todavía en tratamiento psicológico, la nueva colaboradora de ‘Sálvame’ no está preparada para dar este importante paso en su ‘resurrección’ mediática. Ella se expone, sí, pero prefiere vivir ajena a las opiniones que despierta entre los espectadores.

Una oportunidad de negocio

La primogénita de ‘la más grande’ despierta odio y cariño a partes iguales. Desde la emisión de la serie documental, Rocío Carrasco cuenta con un numeroso ejército de fans que la defienden con uñas y dientes de la también importante horda de detractores que la atacan sin cesar. Aun a riesgo de recibir insultos de forma constante, lo cierto es que la empresaria está desaprovechando una oportunidad de negocio al permanecer ajena a las redes sociales. Resulta evidente que podría hacerse con varios miles de seguidores en cuestión de pocas horas, un reclamo muy jugoso para empresas y marcas que buscan anunciarse en los perfiles más destacados de estas plataformas a cambio de una buena suma de dinero.