Precampaña electoral

Los sondeos dibujan unas elecciones abiertas en Alemania

Los socialdemócratas remontan hasta superar a Los Verdes y colocarse a dos puntos del partido de Merkel

Cartel electoral del candidato del SPD a las elecciones federales del 26 de septiembre, Olaf Scholz
Cartel electoral del candidato del SPD a las elecciones federales del 26 de septiembre, Olaf ScholzFABIAN BIMMERREUTERS

Cuando el ex presidente del Parlamento europeo y candidato socialdemócrata en 2017 Martin Schulz aseguró en un programa de televisión que se podía llegar a ser canciller de Alemania con solo el 20% de los votos, nadie le tomó muy en serio. Sin embargo, a menos de 40 días de las elecciones federales, la predicción del ex librero puede haber dado en el clavo. El último sondeo publicado por el instituto Forsa para la cadena RTL muestra que a los tres grandes partidos alemanes apenas les separan cuatro puntos en intención de voto, lo que dibuja el resultado electoral más abierto que se recuerda en Alemania.

La encuesta muestra que el Partido Socialdemócrata (SPD), estancado en el 15% durante meses, remonta al 21% hasta superar por primera vez en el último año a Los Verdes (19%) y colocarse a solo dos puntos de la alianza conservadora CDU/CSU (23%) de Angela Merkel, que por primera vez desde 2015 no es candidata de su partido. Desde que, precisamente Schulz no fue proclamado cabeza de la lista en marzo de 2017, el SPD no pisaba tanto los talones a la CDU/CSU.

Por detrás de los tres partidos con opciones de relevar a Merkel, están los liberales del FDP, con el 12%, los ultraderechista de Alternativa para Alemania (AfD), con el 10%; y La Izquierda, con el 6%.

De confirmarse esta tendencia durante la campaña, la estrategia del aspirante del SPD, Olaf Scholz, de presentarse como el candidato con mayor experiencia para liderar Alemania ha terminado por calar entre los electores. No por casualidad, como ministro de Finanzas y vicecanciller, Scholz ha sido el responsable de las ayudas económicas para hacer frente a las consecuencias de la pandemia de coronavirus y, más recientemente, a las devastadoras inundaciones sufridas en julio en el suroeste del país.

Precisamente, esta tragedia natural ha supuesto un duro golpe para la campaña del candidato de la CDU/CSU y sucesor de Merkel, Armin Laschet, al que se le vio reírse durante una visita a una de las localidades anegadas por el agua.

Últimos sondeos
Últimos sondeosAntonio Cruz

En caso de que los alemanes pudieran elegir directamente a su futuro canciller, Scholz se impondría fácilmente a sus rivales. El aspirante del SPD es el preferido por 29% de los encuestados, frente al 15% que se decanta por la candidata ecologista, Annalena Baerbock y el 12% por Laschet. Lo más paradójico es que, entre los votantes de la CDU/CSU, un 27% prefiere al socialdemócrata frente a un 24% que es fiel a su candidato.

En un Parlamento de 728 diputados, los conservadores seguirían siendo la principal fuerza con 192 escaños; seguidos de los socialdemócratas, con 172; Los Verdes, con 155; los liberales, con 98; La Izquierda, con 49; y AfD, con 82.

Según esta distribución de escaños, se vislumbran diferentes alternativas para gobernar. Una «coalición Alemania» (llamada así por el color de los partidos) entre conservadores, socialdemócratas y liberales, que sumaría 462 escaños, por encima de la mayoría absoluta de 374. También liderada por la derecha una «colación Jamaica» entre CDU/CSU, verdes y FDP, que reuniría 445 escaños.

En cambio, los socialdemócratas podrían encabezar una «coalición semáforo» con verdes y liberales, que alcanzarían los 425 diputados. Una cuarta posibilidad, aunque con una estrecha mayoría de 376, sería la formación de un tripartito de izquierdas entre SPD, verdes e izquierdistas, pero despierta un fuerte rechazo entre amplios sectores socialdemócratas por los vínculos de Die Linke con la extinta RDA.

De los cuatro escenarios, los socialdemócratas participan en tres de los mismos, mientras que los conservadores solo en dos, lo que muestra las ansias de cambio que muestra el electorado alemán tras 16 años de Gobiernos encabezados por la CDU/CSU. El “merkelismo” sin Merkel, que aún goza de una enorme popularidad, parece no seducir a la mayoría.