El ataque al Hotel Hayat concluye con 21 muertos, la mayoría de ellos civiles

Las autoridades somalíes anunciaron este domingo el final de un ataque terrorista al Hotel Hayat, en Mogadiscio, donde al menos 21 personas (en su mayoría civiles) fueron asesinadas, y 117 resultaron heridas durante el tiroteo propiciado por hombres armados en este conocido hotel de la capital. Las Fuerzas de Seguridad necesitaron más de 30 horas para neutralizar a los insurgentes, que comenzaron el asalto del hotel este viernes mediante el uso de potentes explosivos camuflados en bolsas de plástico, y utilizando también armas de fuego.

Según confirmó a la prensa el jefe de policía, Abdi Hassan Hijar, el asalto concluyó en la medianoche entre el sábado y el domingo.

No se conocen demasiados datos por el momento. Solo que un nutrido número de asaltantes pertenecientes al grupo yihadista Al-Shabaab, que ya ha anunciado su responsabilidad en los sucedido, hizo su entrada en el hotel (conocido por ser un lugar común de residencia para políticos y funcionarios de paso en la capital) aprovechando la confusión provocada por las explosiones, y que rápidamente se hicieron con varios rehenes, entre los que se encontraban mujeres y niños. Abdi Hassan Hijar aseguró que “durante el ataque, las Fuerzas de Seguridad rescataron a numerosos civiles atrapados en el hotel”, mientras que el gerente del hotel, Ismail Abdi, comunicó a Associated Press que las autoridades todavía se encuentran en tareas de limpieza dentro de la zona. Fuentes oficiales aseguran que 106 civiles fueron rescatados al término de la operación.

Los últimos disparos se escucharon a las 9 de la mañana, hora local, momento en que los vecinos de la zona aprovecharon para aproximarse al hotel, cuyas puertas han sido gravemente dañadas a causa de los explosivos utilizados por los atacantes. Este es el primer ataque terrorista de una importancia significativa que sufre Mogadiscio desde la toma de poder en mayo de su actual presidente, Hassan Sheikh Mohamud. El Secretario General de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, condenó el ataque a la que reiteró su apoyo a Somalia “en su lucha contra el terrorismo y en su marcha hacia la paz”.

Al-Shabaab, la amenaza yihadista en Somalia

Grupo yihadista operativo desde 2006. Aunque su rango de acción le ha llevado a cometer actos terroristas en Yemen, Kenia y Uganda, su actuación se centra mayoritariamente en Somalia, donde controla amplios territorios fértiles ubicados al sur del país. Al igual que otros grupos yihadistas del continente, los miembros de Al-Shabaab ofrecen a los ganaderos vivir dentro de su territorio, siempre y cuando acepten las rígidas normas de la sharía. Los ganaderos se ven entonces ante tres posibilidades: huir de Al-Sahaab, aceptar sus normas y su opresión, o morir. Cada vez parece más sensato aceptar la segunda posibilidad, si la huida significa igualmente la muerte y la sed de la sequía.

El 25% del territorio somalí está conformado por desierto, mientras que la carne supone el segundo producto de mayor exportación en el país, solo por detrás del oro. Al-Shabaab no solo es culpable de provocar una enorme inestabilidad en el Cuerno de África, sino que también es una causa directa de la creciente hambruna que actualmente sufre Somalia. El último recuento estipula que al-Shabaab cuenta con casi 10.000 combatientes, cuyo objetivo principal radica en derrocar al Gobierno legítimo y establecer un Estado Islámico en Somalia. Se reconoce su vinculación con al-Qaeda, lo que vuelve a Al-Shabaab un firme contrincante del Estado Islámico en África.