Turismo

Un pueblo de Escocia atrae a fans de Harry Potter y harta a sus vecinos: hay más basura y "heces humanas"

La saturación turística desafía la sostenibilidad del emblemático escenario del Hogwarts Express

Puentes como este, conocido por haber servido de escenario durante la escena del coche volador de Harry Potter, son algunas de las bellezas disponibles en las tierras altas de Escocia.
Puentes como este, conocido por haber servido de escenario durante la escena del coche volador de Harry Potter, son algunas de las bellezas disponibles en las tierras altas de Escocia.iphotoclickpixabay

El icónico viaducto de Glenfinnan, en Escocia, conocido mundialmente por aparecer en las películas de Harry Potter como el paso del tren hacia Hogwarts, se ha convertido en escenario de una situación insólita y desagradable. Los vecinos denuncian que algunos turistas, incapaces de encontrar baños adecuados en la zona, están dejando excrementos humanos en las inmediaciones del famoso lugar.

La sobrecarga turística ha generado problemas que van más allá del simple colapso logístico. Empleados del lugar han experimentado intimidaciones, los servicios públicos están colapsados y el entorno natural sufre una presión sin precedentes. El National Trust for Scotland, entidad encargada de la gestión del área, reconoce que la infraestructura actual no está preparada para soportar semejante volumen de turistas.

Problemas estructurales

Los vecinos han expresado su indignación, denunciando que el lugar, que antes era un símbolo de orgullo local y atracción cultural, se ha visto degradado por la falta de planificación y de servicios básicos. “Es vergonzoso que el viaducto, que debería ser un punto de referencia histórico y cinematográfico, se convierta en un foco de suciedad”, han señalado algunos residentes en declaraciones recogidas por el periódico escocés The National.

Las prácticas irrespetuosas de algunos visitantes, como el vertido de residuos químicos en desagües públicos, evidencian la urgente necesidad de implementar medidas de control y educación turística. Los responsables locales han debido recurrir incluso al uso de cámaras corporales para documentar incidentes y proteger al personal.

Ante esta situación, las autoridades locales están trabajando en medidas para mitigar el impacto del turismo masivo. Entre las propuestas figuran la mejora de los accesos, la instalación de más baños públicos y un servicio de autobús lanzadera desde Fort William —la ciudad más cercana, situada a unos 25 kilómetros al sur de Glenfinnan— para reducir el tráfico.