El PP se querellará contra el Gobierno valenciano por poner en peligro a los pacientes ingresados en el hospital de campaña

El PPCV iniciará acciones penales contra el Consell por el uso del hospital de campaña en Valencia por “haber puesto en riesgo” la vida de los pacientes ingresados en unas instalaciones que no estaban aún en condiciones para ser utilizadas.

La portavoz del PP en Les Corts, Isabel Bonig, ha recordado que en abril su partido ya advirtió al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, de que estas instalaciones no eran adecuadas y propuso que se adecuara Feria Valencia. Además, en la última reunión que mantuvo con el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, le mostró uninforme del Servicio de Prevención de Riesgos Laborales en el que se señalaban graves deficiencias, entre ellas, su deficiente aislamiento.

Pese a estas advertencias, esta semana pasada se comenzó a trasladar a pacientes leves de covid a esta carpa y ayer domingo tuvo que ser desalojado debido a las fuertes rachas de viento.

La consellera de Sanidad, Ana Barceló, negó en Les Corts la validez de este informe porque “no estaba firmado” al tiempo que afirmaba que todas las deficiencias estaban subsanadas. Sin embargo, el diputado popular en este área, José Juan Zaplana, ha solicitado la palabra en Les Corts, donde estaba compareciendo Barceló, para mostrar el documento con la firma.

Por su parte, el presidente Puig, ha defendido los hospitales de campaña como una buena solución para atender el incremento de enfermos.

Callar a los sanitarios

La líder popular se ha referido a la querella criminal que va a poner la Conselleria de Sanidad a la doctora María Ángeles Medina por decir que la capilla del hospital de Elche se utilizaba como morgue. “Es un acto para silenciar a las voces de los sanitarios que piden un autoconfinamiento a la población ante las UCI y los hospitales colapsados”.

”Esto es peor que el comunismo, coartando la libertad de expresión de unos profesionales que están desesperados”, ha clamado Bonig, quien ha lamentado el silencio de UGT y CCOO y ha asegurado su actitud sería diferente si fuera el PP el que tomara las decisiones.