Tribunales
El Supremo ve indicios de delito con el metálico del PSOE y pide a la Audiencia que lo investigue
Puente asegura que el exgerente y la empleada de Ferraz no despejaron ninguna incógnita y apunta a posibles "actividades irregulares"
El magistrado Leopoldo Puente ha derivado a la Audiencia Nacional la parte del caso Koldo relativa a los pagos del PSOE a José Luis Ábalos y su antigua mano derecha. El instructor sostiene que, a tenor de los últimos indicios recabados, se podría estar ante "actividades irregulares, e incluso potencialmente delictivas" en relación con los abonos de Ferraz y deriva a la Audiencia Nacional esta parte de las pesquisas para que las investigue.
Por ese motivo, el magistrado remite a Ismael Moreno, instructor del caso Koldo en la Audiencia Nacional, el último informe de la Guardia Civil en el que se desvela el cobro de sobres en metálico por parte de Koldo García, además de toda la información facilitada por el PSOE acerca de los pagos en metálico y de las declaraciones prestadas esta misma semana por el exgerente del partido Mariano Moreno Pavón y por la empleada de la Secretaría de Organización Celia Rodríguez.
Del mismo modo, el instructor deriva también el testimonio de Carmen Pano, quien declaró como testigo que levó dos bolsas con 45.000 euros cada una a Ferraz en octubre de 2020 por orden de Víctor de Aldama. Precisamente, también cita al comisionista de la trama y en concreto, la confesión que prestó en sede judicial el 16 de diciembre del año pasado, cuando dijo que, según le trasladó Koldo, parte de las comisiones que se repartían por las presuntas actividades ilícitas iban para el partido.
"Estas incógnitas deben ser despejadas"
"Es claro que todas estas incógnitas deben ser despejadas, tras practicarse la investigación correspondiente, en la medida en que pudieran denotar la eventual existencia de conductas o actividades irregulares, e incluso potencialmente delictivas. Sin embargo, parece claro también que la actividad del partido político, sea finalmente una u otra la calificación jurídica que merezca, no se halla inescindiblemente vinculada a los hechos aparentemente delictivos que constituyen el objeto de la presente causa especial, cuya competencia, además corresponde a este Tribunal Supremo únicamente por la condición de aforado que ostenta el Sr. Ábalos Meco", expone el instructor.
De esta forma el magistrado cumple con lo advertido en su auto de citación de Moreno Pavón y de Rodríguez, ya que entonces avisó que deduciría testimonio en función de las explicaciones que dieran los testigos. De hecho, dedica buena parte del auto a las justificaciones que ambos dieron en sede judicial y que, según expone, no logran aclarar los desajustes con los pagos de la caja a Koldo García.
De hecho, explica que citó a estos testigos a raíz del silencio guardado en sede judicial por Koldo García y José Luis Ábalos. El magistrado les convocó tras incorporar el oficio de la UCO que advierte del cobro de partidas en metálico del PSOE que no coinciden con la información que aportó la formación. El objetivo era que ambos investigados explicaran el concepto de estos desembolsos, el origen y si se beneficiaron de una fuente de financiación irregular durante los años investigados.
No existe constancia del destino de los pagos
Su silencio propició la citación de los testigos que aparecen en el informe de la Guardia Civil para que, según explica el instructor, pudieran ofrecer "una satisfactoria explicación al respecto, excluyente, si ese fuera el caso, de cualquier posible responsabilidad en la que dicho partido político pudiera haber incurrido". Sin embargo, las respuestas de ambos, lejos de despejar las dudas con los descuadres, levantaron más sospechas entre los investigadores, que llegaron a cuestionar la ausencia de control del efectivo que manejaba el partido.
"Lo cierto es que ambos testigos se limitaron a explicar que los pagos no recogidos en la información proporcionada en la causa por el PSOE no se realizaron, efectivamente, en favor de los Sres. Ábalos Meco o García Izaguirre,(...) desconociendo, en definitiva, las razones que podrían justificar la existencia de mensajes de los posibles beneficiarios referidos a otros pagos en metálico distintos de aquéllos, a no ser que se tratara, como resulta también de las alegaciones presentadas posteriormente por el mencionado partido político, de la liquidación de gastos en los que hubiera podido incurrir “el equipo de organización”, explica.
Efectivamente, los testigos aseguraron que los sobres que Koldo (y a veces su exmujer, Patricia Úriz o su hermano, Joseba García) recogía en Ferraz no eran para ellos, sino que eran gastos que correspondían al equipo de Ábalos. Se trata de un extremo que llamó la atención del instructor y del fiscal jefe Anticorrupción, toda vez que Koldo no tenía cargo en el partido, sino que era asesor de Ábalos en el Ministerio.
Las lagunas con el efectivo de Ferraz
"De las pruebas testificales practicadas resultaría que todos los pagos en metálico efectuados bajo el concepto de devolución de gastos realizados habrían sido reclamados, precisamente, por don Koldo García Izaguirre, --quien no consta desempeñara cargo alguno en la referida Secretaría de Organización--, y le habrían sido abonados, en metálico, al mismo o a la persona que, a su plena discreción, él designara (su esposa Dª Patricia, un mensajero que acudía a recoger el sobre a las oficinas del partido, etc.), sin que exista tampoco (...) constancia alguna de que dichas cantidades fueran distribuidas posteriormente por don Koldo en favor de las personas (indeterminadas) del equipo de la secretaría de organización que hubieran podido incurrir en los gastos a cuya devolución obedecían los pagos", recalca ahora el instructor.
Del mismo modo, tampoco quedó explicado "de manera suficiente" quien era la persona, y cuál el procedimiento, que comprobaba, en su caso, las facturas presentadas por quienes, en su ámbito de actuación vinculada al partido, obtenían compensación en metálico de los pagos. Los testigos explicaron que ellos recibían los tickets (normalmente de comida y de gasolina) y que éstos, presuntamente, habían sido visados previamente por Administración. Moreno Pavón, por su parte, dijo que todos los gastos los autorizaba el secretario de Organización.
Pero el juez sospecha de estas entregas porque no solo no se comprobaba si el dinero llegaba al equipo, sino que tampoco se verificaba si los receptores de ese dinero habían justificado correctamente la devolución del mismo. "De tal manera que no fuera posible que, adelantado el dinero por éstos para satisfacer esos gastos eventualmente con fondos procedentes de una actividad ilícita --o, incluso delictiva--, no se estuviera, al compensarles dichos gastos, blanqueando su procedencia, máxime cuando, al parecer, una persona podía encargarse de gestionar la liquidación de gastos efectuados no por él sino por terceros", expone.
"Nada esclarece, en consecuencia, definitivamente al respecto la documentación aportada por el Partido Socialista Obrero Español expresiva de que, en efecto, con cierta periodicidad los fondos contabilizados en caja procedían de su cuenta bancaria. Es claro que, de haber existido pagos en metálico distintos de los efectivamente contabilizados, tampoco podrían estarlo los ingresos con los que aquéllos se nutrían", concluye el magistrado.

 
	                