Críticas al enlace

Marta López defiende su boda de las quejas: ¿poca comida, jamón salado, corvina dura?

Los asistentes criticaron el vestido, el ambiente, la fiesta, la decoración y hasta que el lugar parecía un polígono. La comida sale mal parada. La novia lo aclara

Marta López y Alejandro Huerta en su boda
Marta López y Alejandro Huerta en su bodaLecturas

Marta López y Alejandro Huerta ya son marido y mujer. Después de poco más de un año de relación, la pareja se ha dado el ‘sí, quiero’ ante cerca de 400 invitados, entre familia, amigos y compañeros de la televisión. Por supuesto, a ninguno le pilló por sorpresa que habría exclusiva, aunque no solo con el montante que ha pagado la revista se ha podido celebrar tan ingente celebración. El menú se filtró de antemano y estimuló el paladar de los más exigentes, el vestido de novia fue descrito por sus amigas en directo y otros detalles trascendieron antes de la salida del ejemplar al kiosco rosa.

Sin embargo, este lunes ya se ha podido tener acceso a todos los detalles del enlace. Una boda que, para su director, es la del año, a pesar de que para ella es la tercera y que coincidía con la de Jeff Bezos y Lauren Sánchez, valorada en 30 millones de euros. Pero bueno, en España sí que era la más mediática del fin de semana. En este enlace el secreto mejor guardado no era el vestido de la novia, sino el rostro del novio: “Hasta ahora había sido un eterno pixel, un novio escondido”, reconoce Luis Pliego, director de ‘Lecturas’.

Todos los detalles de la boda de Marta López

En plató de ‘TardeAR’ coinciden dos invitados al enlace: Luis Pliego y Miguel Ángel Nicolás, que prometen contar todo lo que vivieron este fin de semana. No todos hablan bien de la boda, como se apresura a aclarar Belén Rodríguez: “Yo he escuchado unas cosas tremendas de la boda y las he escuchado en Telecinco por parte de compañeros que estaban invitados. Quiero decírselo a Marta a la cara para que se pueda defender”. Entre las quejas que han llegado a sus oídos están las críticas al vestido, a la decoración, que el pescado estaba duro, que la comida era escasa y que el sitio parecía una nave industrial.

Miguel Ángel Nicolás matiza: “Sobre la comida, te han engañado, porque hubo comida para un regimiento. De hecho, había tanta comida, cuatro horas de cóctel, que ya estábamos deseando pasar a cenar, porque estábamos cansados de tanto cóctel”. Le preguntan si estaba buena, a lo que subraya que “era muy abundante”. Le rescata del apuro Luis Pliego, que señala que “es muy complicado cocinar para 400 invitados. Si alguien se comió una corvina un poco dura, eso se llevó”.

Una hora más tarde, Marta López entra sonriente a ‘TardeAR’, aunque no le espera una tarde sencilla. Ella recuerda su mágico día como “una fiesta muy bonita, una fiesta que estábamos celebrando el amor y las pegas las pondrán ellos, porque para mí…”, deja abierto el buzón de sugerencias que parece cargado de reproches. El vestido no convenció a todos, pues el primero era muy clásico. Ágatha Ruiz de la Prada destaca que la manga larga con el calor que hacía no era apropiada, que la pedrería a los hombros le restaba elegancia y que, al no ser su primera boda, que no debería haberse casado de blanco. Ella lo defiende, pues era como se sentía cómoda y lo tuvo claro al verlo, pues no se probó ninguno más: “La tela buena no te hace pasar calor”.

Portada con la boda de Marta López y Alejandro Huerta
Portada con la boda de Marta López y Alejandro HuertaLecturas

Hay quien define la boda de Marta López como “alfombra roja con barra libre”. También que invitó a muchos por compromiso o que “había invitados de primera y de segunda”. Ella responde y pide perdón a quienes se creían merecedores de una invitación, pero se quedaron en tierra, entre ellos Alexia Rivas o Miguel Frigenti. El sitio, el Mirador de Cuatro Vientos, dice que es el mejor para celebrar una boda, que la comida es excelente y si a alguien no le gustó, también pide perdón. Niega que fuese escasa o que el jamón estuviese salado. Las quejas son muchas, las excusas iguales.