La crisis energética abre una puerta a la esperanza a Garoña
Los más de mil trabajadores y familias que dependen de la central nuclear burgalesa de Santa María de Garoña ya empiezan a vislumbrar una puerta abierta a la esperanza y ven el horizonte con mayor optimismo, a pesar de que el ministro de Industria, Miguel Sebastián, asegurara el pasado miércoles en el Congreso que esta planta se cerrará en 2013, como está previsto