Móviles

Adiós a Internet: los jóvenes ya no quieren vivir con él

Cuestiones como la privacidad y la salud mental preocupan a una generación para quien lejos de suponer una oportunidad la red puede ser un escenario problemático

Los peligros presentes en la red condicionan el uso por parte de los jóvenes
Los peligros presentes en la red condicionan el uso por parte de los jóvenesPexels

Las medidas de protección de cara a los jóvenes y el uso de móviles centran buena parte de los objetivos de las asociaciones que estudian las consecuencias de un exceso de tiempo con pantallas, más si cabe cuando hay informes que señalan que la edad media de acceso a un teléfono móvil son los once años.

Pero mientras desarrolladores de aplicaciones y gobiernos no parecen encontrar el punto de encuentro de cara al bienestar digital de los más jóvenes, éstos sí parecen tener claro que no quieren un mundo en el que la dependencia de los teléfonos móviles y de Internet condicionen sus vidas.

Preocupación por la salud digital entre los jóvenes

Al menos así se desprende del estudio realizado por BSI, el organismo nacional de normalización del Reino Unido y en el que han sido encuestados 1.293 jóvenes británicos, de los que un 47% con edades comprendidas entre los 16 y los 21 años han señalado que preferirían vivir en un mundo sin internet, mientras que el 50% considera favorable la implantación de un toque de queda en las redes sociales.

Estas cifras se recogen en el informe elaborado por BSI y que lleva por título “Apoyando un mundo seguro y protegido para los adolescentes: generando confianza en la tecnología del futuro”. En el estudio se recogen también la percepción de los jóvenes de que su vida desde la pandemia del COVID-19 se desarrolla más en el plano digital, lo que alerta de la necesidad de un marco en materia de privacidad y de prevención en salud mental.

De hecho, tres de cada cuatro jóvenes de los participantes en la encuesta achacan a la pandemia el crecimiento del tiempo que pasan conectados: dos de cada tres dieron la cifra de dos horas como tiempo mínimo diario en redes sociales, mientras que los que pasan cuatro horas al día en redes, con los riesgos que comporta, son uno de cada cuatro, según el estudio.

Ese tiempo de exposición choca con otro dato que se extrae del informe presentado por BSI, y es el hecho de que el 68% de los encuestados reconoce malos sentimientos y sensación de culpa tras haber estado más tiempo del debido en línea. Una muestra más de la importancia que el plano mental y su protección debe tener en esta materia.

Entre los datos preocupantes del estudio también se observa que el 42% de los jóvenes reconoce haber mentido a sus padres acerca de lo que realiza en la red y el mismo porcentaje afirma haber mentido acerca de su edad, ya sea en interacciones con otros usuarios o para acceder a las redes sociales.

La veracidad también queda en entredicho a tenor de las cifras que aporta el informe británico puesto que el 40% de los jóvenes admite haber creado una cuenta falsa y uno de cada cuatro reconocen haber fingido ser otra persona.

La calidad de vida de los jóvenes, en entredicho

La propia directora ejecutiva de BSI, Susan Taylor Martin, exponía en la presentación del estudio las preocupaciones que el organismo albergaba ante las respuestas de los jóvenes encuestados, una generación a la que se había prometido un futuro tecnológico que traería nuevas oportunidades y acercaría a quienes se encontraran lejos: “Sin embargo, nuestra investigación demuestra que, además de esto, expone a los jóvenes a riesgos y, en muchos casos, afecta negativamente su calidad de vida”, destacó Susan Taylor Martin.

El hecho de que a juicio del informe presentado por BSI sean los propios jóvenes quienes estén detectando los problemas del entorno digital debe poner en alerta tanto a padres como a gobiernos y responsables de aplicaciones de cara a desarrollar un marco en el que prime la protección, la privacidad y la salud mental de los más jóvenes.