Pandemia

Las residencias aseguran que hay unos 6.000 mayores todavía sin vacunar

La vacunación se paralizó a partir del 18 de enero en centros que habían tenido brotes

Vacunación en una residencia de ancianos
Vacunación en una residencia de ancianosAYTO.DE ARBÚCIESAYTO.DE ARBÚCIES

La Asociación Empresarial de Residencias y Servicios de Atención a la Dependencia de la Comunitat Valenciana (Aerte) ha reclamado este lunes a la Consellera de Sanidad Universal y Salud Pública, Ana Barceló, que termine el proceso de vacunación en residencias, ya que, según han asegurado, “faltan más de seis mil personas por vacunar”.

En un comunicado, Aerte ha afirmado que las personas que se encuentran en centros que tuvieron brotes de covid en momentos previos o durante la campaña de vacunación empezaron a ser vacunadas a partir de la semana del 11 de enero pero que a partir del 18 de enero comenzaron a suspenderse sin fecha las administraciones de las primeras dosis en estos centros.

Han lamentado que en vez de seguir vacunando, “la decisión fue paralizar la administración de estas primeras dosis para garantizar que se pudieran poner las segundas”.

El presidente de Aerte, José María Toro, ha explicado que la administración “debe priorizar a las personas que están en las residencias y a su personal, debido a su vulnerabilidad al virus, por lo que tendrían que haber guardado esas dosis que se necesitaban para administrarlas en las residencias desde el primer momento que fuera posible”.

Toro ha destacado que, “sin embargo, se ha vacunado a miles de profesionales sanitarios, lo que nos parece bien, pero sin tener en cuenta esa pequeña reserva para las residencias, con lo que no estamos de acuerdo”.

Asimismo, ha expuesto que, según la información trasladada por la Consellería de Sanidad Universal y Salud Pública, el proceso de vacunación en residencia se empezará como muy tarde en la semana del 8 al 14 de Febrero, una fecha que Aerte considera como un plazo “demasiado largo”.

La situación epidemiológica de la Comunitat Valencian, la más grave de toda España, “hace aún más necesario acelerar el proceso de vacunación ya que se somete a un riesgo elevadísimo a las personas más vulnerables al virus, las mayores de 80 años”, ha recalcado José María Toro

“Si la vacuna que se administra además es la de Moderna, el plazo entre dosis es de 28 días y el periodo de inmunización empieza a los 14 días desde la segunda, lo que alarga la inmunidad 14 días frente a la de Pfizer”, ha aseverado el presidente de Aerte..

Por ello ha pedido que se vacune “en centros de día, viviendas tuteladas y servicios de ayuda a domicilio”, así como también ha reclamado la inclusión con prioridad 1 en la campaña de vacunación de las personas atendidas en los centros de día, las viviendas tuteladas y las personas atendidas por servicios de ayuda a domicilio.

“La vulnerabilidad es de las personas atendidas dependientes, mayores o con diversidad funcional, y no del tipo de centro. Por eso es necesario que se vacune a estas personas, se les atienda donde se les atienda”, ha concluido.